El pasado viernes por la tarde, unos pocos usuarios de Twitter recibieron un mensaje inquietante. Remitido desde la cuenta oficial de Twitter -info@twitter.com-, en el aviso se alertaba de que ese perfil podría haber sido objeto de una “operación ordenada por un estado” y que se “habría podido obtener información, como direcciones de correo electrónico, direcciones IP y/o números teléfono”. Extrañamente, la empresa no mencionaba nada en ninguna de sus 36 cuentas oficiales. Ni siquiera la de seguridad.
Fuentes de la compañía aseguran a eldiario.es que “efectivamente se han hecho esas notificaciones”, y que “no estamos dando más información porque estamos en un proceso de investigación”. Todo ocurrió el pasado viernes, entre las 17:15 y las 17:30 horas. Un número aún por confirmar de usuarios -aunque algunas publicaciones como The Verge sitúan en torno a 11-, recibieron el mensaje privado alertando de que la seguridad de su cuenta podría haber sido comprometida: “Creemos que esta operación (posiblemente asociada a un gobierno) ha podido intentar obtener información, como direcciones de correo electrónico, direcciones de IP y/o números de teléfono”.
“Desearíamos tener más información que compartir, pero no disponemos de más información en este momento”, continuaba el aviso. Ian Plunkett, manager de comunicaciones de Twitter en Europa, asegura que “tan pronto como este hecho llamó nuestra atención, empezamos a trabajar concienzudamente para proteger a nuestros usuarios y para entender la naturaleza de la amenaza”.
Esta es la primera vez que la compañía de los 140 caracteres con sede en San Francisco alerta a sus usuarios de que podrían estar siendo espiados por algún gobierno, algo que ya hacen Google y Facebook. La cuenta @Coldhakca fue la primera que dio aviso en Twitter del mensaje. También es la única organización privada a la que la compañía del pajarito ha alertado. Además, uno de los creadores de Tor, Jacob Appelbaum, también ha sido espiado. Como él, una periodista especializada en ciberseguridad, una investigadora sobre vigilancia en Internet o, incluso, un español vinculado al proyecto Tor.
Si usas Tor podrías estar en el punto de mira
En el pasado, varias personas vinculadas al entorno de Appelbaum se quejaron de que Twitter bloqueaba las cuentas que accedían a través Tor o borraba sus tuits. Para intentar despejar la polémica, en septiembre, la publicación Motherboard contactó con un portavoz de la compañía, que aseguraba: “Twitter nunca ha bloqueado Tor, y muchos usuarios confían en la red Tor por la seguridad y privacidad que otorga”. Quizá por eso, el aviso que la red social mandó a sus usuarios el viernes terminaba animando al uso de la red de anonimato. Una portavoz del proyecto Tor, Kate Krauss, ha contado a este diario que “estamos esperando más información por parte de Twitter. La mayoría de la gente que ha recibido los mensajes de Twitter pertenecen, en su mayoría, a la comunidad acerca de la privacidad en línea, no solo con Tor”.
“Para obtener consejos sobre cómo proteger su seguridad online, puede visitar los siguientes enlaces Tor Project (en inglés) o EFF Protegiéndote en las redes sociales (en español)”. Sin embargo, los usuarios que han recibido los avisos están convencidos de que su vinculación con Tor les ha hecho objetivo de esta campaña. Pablo es uno de ellos. Recibió el aviso en la tarde del viernes, “probablemente por involucrarme con Tor”, dice. “También sigo por Twitter a algunas personas directamente involucradas en el proyecto y he montado algún nodo de colaborador o voluntario”, explica Pablo a eldiario.es.
No es el único que piensa así. Otros usuarios con los que ha hablado la periodista Sarah Jeong y cuyos testimonios recoge en este artículo también sienten que el uso de Tor es la razón principal por las que están siendo objeto de vigilancia. “Colin Childs, uno de los fundadores de Coldhak, es un empresario vinculado con Tor Project”, dicen desde Coldhak. La investigadora Runa Sandvik también recibió el aviso: extrabajadora de Tor, ahora da clases a periodistas sobre privacidad y seguridad, y también cree que el mensaje que Twitter la envió el pasado viernes está relacionada con su trabajo. A pesar de todo, desde San Francisco se muestran tajantes: “Desearíamos tener algo más que compartir, pero no tenemos ninguna información adicional que proporcionar ahora mismo”, cuentan a este diario.
*Este artículo ha sido actualizado tras su publicación.