Ni qué decir tiene que El Hormiguero y La Revuelta han sido los grandes protagonistas de la semana en televisión. Hacía años que dos programas no protagonizaban una batalla televisiva tan mediática y seguida por la audiencia. La politización del duelo y las polémicas creadas alrededor de sus protagonistas han contribuido a ello, aunque el paso de los días ha puesto sobre relieve una razón mucho más sencilla para explicar todo esto: al final, Pablo Motos y David Broncano solo están haciendo dos programas que gustan muchísimo a la gente.
Los datos de audiencia así lo refrendan. El Hormiguero y La Revuelta han completado su primera semana de convivencia siendo las dos ofertas más vistas de la televisión, con más de 2.3 millones de espectadores de media y cuotas de auténtico infarto (20.5% y 18.4%, respectivamente). Un éxito que no es nuevo para el veterano show de Trancas y Barrancas, pero sí para Broncano y su equipo, que han traducido en grandes audiencias lineales el tirón que aparentemente tenían en La Resistencia, el cual que solo podían medir a través de YouTube y las redes sociales.
Ahora ya no están en la televisión de pago, sino en el abierto, por lo que su terreno de juego ha cambiado por completo. De momento se han adaptado perfectamente a él, y además sabiendo fabricarse su propio espacio sin 'molestar' demasiado a los demás. De hecho, las cifras de El Hormiguero no se han visto afectadas por su llegada, aunque sí su dominio dentro del access prime time. Básicamente, porque ha dejado de ser esa oferta imbatible que barría sin piedad al resto de contenidos, pues por primera vez en muchos años tiene un rival a su altura.
Esto obliga a Motos y su gente a ir un paso más allá. Como suelen decir los profesionales de la industria, la competencia es buena porque fuerza a todos a ser mejores. Y El Hormiguero, que venía siendo el mejor en lo suyo, no puede relajarse ni lo más mínimo si quiere mantener la corona del access prime time. Tampoco La Revuelta, que tendrá que refrendar la próxima semana su excepcional aterrizaje en TVE, inesperado incluso para ellos mismos.
La semana de 'El Hormiguero' en audiencias
El Hormiguero comenzó su temporada el lunes 2 de septiembre. Entre ese día y el jueves 5, el programa de Pablo Motos promedió un 20% de cuota media, el mejor inicio de curso de toda su historia. Por tanto, llegó al primer envite con La Revuelta en plena forma, pero por si acaso programó para ese lunes día 9 una visita de impacto: la primera entrevista de Victoria Federica en un plató de televisión.
La sobrina de Felipe VI no defraudó en audiencias (23% de share y 2.893.000), lo que permitió a El Hormiguero abrir con victoria su duelo contra el nuevo programa de La 1 (+5.3 puntos en estricta coincidencia). Lo que no entraba en los planes es que tuviera que esperar tres días para el siguiente triunfo, que llegó el jueves de la mano de Lamine Yamal (23.2% y 3.107.000), otro invitado joven, mediático e inédito en el programa.
Entre medias, Motos recibió en plató a viejos conocidos del público como son Javier Cámara (17.5% y 2.103.000) y los coaches de La Voz (18.2% y 2.257.000), que le hubieran bastado en cualquier escenario sin La Revuelta para liderar el access. Y además holgadamente. Sin embargo, esta semana no ha sido así por el formato de La 1, lo que invita a a pensar que, de seguir así las cosas, el show de Antena 3 va a necesitar invitados muy especiales para ganarle en el día a día. De momento, ya ha anunciado para el martes a Ilia Topuria, y para el jueves a uno de sus talismanes: Miguel Ángel Revilla.
Con ellos y con el resto (Edurne, y Antonio Banderas junto a Marta Ribera) espera repetir lo que ha conseguido en los cuatro últimos días. Porque por mucho que haya llegado La Revuelta, El Hormiguero ha terminado la semana con varios triunfos a su favor. Por ejemplo, ha sido el programa más visto de la televisión (2.583.000 espectadores de media), ha superado en 5.6 puntos la media de Antena 3 (14.9%, líder los cuatro días) y ha firmado la mejor semana en cuota de toda su historia (20.5%). Pero lo más importante es que ha ganado a su rival en estricta coincidencia (en el cómputo general de lunes a jueves):
- El Hormiguero: 19.6% y 2.547.000
- La Revuelta: 18.8% y 2.429.000
Se trata de un balance muy meritorio, por supuesto, aunque dentro de él se esconden varios 'peros'. Uno es la nueva duración de El Hormiguero, que esta temporada se está extendiendo hasta más allá de las 23:00 horas. Y el otro, mucho más relevante, es que esta semana el espacio de 7 y Acción se ha emitido sin publicidad. Sí, La Revuelta también, pero la diferencia es que La 1 no tiene publicidad y El Hormiguero, en cambio, es el programa que más factura por ella. Por tanto, no hablamos de un detalle menor, sino de uno que transmite mucho respeto hacia el programa de Broncano.
La semana de 'La Revuelta' en audiencias
Y bien que ha hecho El Hormiguero en tener ese respeto desde el principio. Al fin y al cabo, La Revuelta no llegaba de nuevas a La 1, sino con la incógnita de saber si trasladaría a la televisión en abierto el éxito que se le presuponía a La Resistencia. Y no solo lo ha hecho, sino que lo ha hecho a lo grande.
En sus primeras cuatro entregas, el programa de humor ha promediado un 18.4% de share y 2.357.000 televidentes. Son unas cifras increíbles para la cadena pública y para el propio formato, que apenas ha tardado una semana en convertirse, por méritos propios, en la oferta de access que más complicado se lo ha puesto a El Hormiguero en muchos años. De hecho, las ocho décimas que los separan en estricta coincidencia son una ventaja ínfima para Pablo Motos, tan acostumbrado a golear a sus rivales por varios puntos de diferencia y llegar a duplicarlos.
La Revuelta ha estrechado el cerco sobre el rey del access ganándole en dos de sus cuatro primeros días de vida. La primera victoria llegó el martes (+1.6 puntos en estricta coincidencia) y la segunda al día siguiente (+3.7). Para entonces, ya había firmado el estreno de un programa de entretenimiento más visto en La 1 (2.152.000 televidentes) desde el que firmó En la tuya o en la mía en 2015. Además, el jueves coronó esta semana de ensueño batiendo su récord de espectadores (2.601.000), por lo que ha ido sumando público con el paso de los días.
Un público joven, además. Porque como ya analizamos, el mérito de La Revuelta es haberse 'inventado' unos espectadores que hasta su llegada no estaban ni en el access ni en la televisión tradicional. Nos referimos a esos jóvenes que veían La Resistencia por redes sociales y que estos últimos días han conectado con La 1 para ver a Broncano y al resto sin esperar al clip de Twitter o Instagram.
De hecho, según la consultora Dos30, el consumo de televisión en el access ha crecido respecto a 2023 y ha alcanzado su cifra más alta de los tres últimos años. Además, la compañía cifra en un 19.3% el crecimiento de público joven respecto a 2023, mientras que Barlovento Comunicación sitúa en casi un 40% el incremento de espectadores entre 13 y 44 años en comparación con la semana pasada. La Revuelta tiene mucho que ver en esto, aunque el público joven no es ajeno a El Hormiguero, ni mucho menos. De hecho, esta semana ha destacado en los segmentos 4-12 años (29.7%) y 13-24 años (27.4%), mientras que el espacio de La 1 se ha mostrado muy fuerte en este último (29.8%) y en el de 25-44 años (31.6%), según Barlovento.
Pero centrándonos en La Revuelta, sus datos han dejado otros dos grandes beneficiados dentro de La 1. El primero es la propia cadena, que sube 1.2 puntos respecto a lo que promedió entre el lunes y el jueves de la semana pasada (pasa del 9.4% al 10.6%). Y el segundo es el Telediario 2 de Marta Carazo, que crece 1.9 puntos entre el lunes y el miércoles y el mismo periodo de la semana pasada (pasa del 10% al 11.9%. No incluimos el jueves porque la semana pasada no hubo TD2 por el partido de la selección española).
Las audiencias del resto del access
Toca hablar de cómo han solventado el resto de contendientes esta exigente semana. Empezamos por Babylon Show, que apuntaba a ser el tercero en discordia dentro de la batalla entre El Hormiguero y La Revuelta. Sin embargo, el programa de Carlos Latre llegó hundido al primer día con los tres en liza. Y eso que arrancó antes (empezó el 26 de agosto) para ir poniéndose a tono, pero enseguida se vio que su propuesta no calaba entre el público. Su primer dato frente a Motos y Broncano (3.1% y 400.000) terminó por enterrar sus opciones. Dos días después, dijo adiós convertido en uno de los más rotundos y dolorosos fracasos de Telecinco. Ahora su espacio lo ocupa Gran Hermano, que el primer día duplicó el access del canal.
Pero como sus problemas venían de antes, no se puede culpar directamente a La Revuelta (ni tampoco a El Hormiguero) de su pronta cancelación. En cambio, el que sí ha experimentado un antes y un después con Broncano ha sido El Intermedio. El programa de laSexta completó su primera semana del curso con una media del 6.9% y 780.000, un dato que hubiera sido superior de no ser porque el jueves 5 coincidió con el Serbia-España de fútbol (ese día, Wyoming hizo un 5%, cuando en toda la semana no había bajado del 7.4%). Sin embargo, esta semana la ha saldado con apenas un 5.2% y 660.000. Es decir, que ha perdido 1.7 puntos entre una semana y otra y se ha quedado, por ahora, en una situación muy incómoda.
Más tranquilo está First Dates, que ha saldado mejor el examen que su rival de laSexta. El dating de Cuatro venía de promediar un 7.9% y 898.000 en su primera semana del curso. Y la segunda, ya con La Revuelta en funcionamiento, la ha cerrado con un 7% y 899.000, por lo que mantiene a su público pese a ceder casi un punto de cuota.
Aunque para tranquilidad, la de Cifras y Letras, que vive al margen de todo. El concurso de La 2 repite la cuota de la semana anterior (3.6%) y encima sube en televidentes (de 389.000 pasa a 427.000), así que el arranque de La Revuelta no le ha afectado.
Sí ha afectado, aunque para bien, a la televisión en abierto, que ha recuperado con la llegada de La Revuelta y la competitividad de El Hormiguero parte del brillo que había perdido en los últimos años. Ahora la televisión lineal disfruta de una batalla de altura como hacía años que no se daba, lo que sin duda la convierte en la verdadera ganadora de esta apasionante semana en audiencias.