Después de cinco años en antena, Viva la vida se despedirá de los espectadores este verano. El programa que presenta Emma García los fines de semana concluirá su emisión en Telecinco el domingo 24 de julio para ceder su espacio a otro formato del que todavía no han trascendido los detalles más importantes.
Lo que sí se sabe es que Mediaset ha optado por entregar las tardes de los sábados y domingos a otra productora, pues Viva la vida corría a cargo de Cuarzo, y el nuevo proyecto está siendo desarrollado por Unicorn Content, productora de El Programa de AR, Ya es mediodía y Ya son las ocho.
Parece este otro movimiento de Telecinco para superar su crisis de audiencia y sobrepasar a Antena 3 en el ajustado duelo que mantiene contra la cadena de Atresmedia. En cambio, sorprende que haya decidido eliminar un programa que en la temporada pasada logró sus mejores datos de audiencia.
Viva la vida se estrenó en mayo de 2017 con Toñi Moreno al frente. Llegó como sustituto de Qué tiempo tan feliz, el magacín que María Teresa Campos presentaba desde 2009 en las tardes del fin de semana. “Es mentira que venga a sustituirla porque María Teresa es insustituible”, aclaró la periodista antes de dar este salto profesional que le consagró como uno de los rostros más conocidos de Mediaset.
Nació como un programa “repleto de actualidad, diversión y sorpresas”, un magacín dedicado a la crónica social, a los culebrones que se gestan en los platós de Telecinco y con especial predilección por las noticias de sucesos. Su duración se amplió notablemente en 2018, cuando pasó a ocupar toda la tarde, desde las 16:00 hasta las 21:00 horas. Además, fue entonces cuando Emma García relevó a Toñi Moreno con aquel inesperado movimiento que generó todo tipo de teorías sobre la enemistad que, según se decía, existía entre ambas presentadoras.
'Viva la vida' rinde ahora mejor que en sus inicios
Las tres primeras temporadas del magacín se movieron entre el 10%-11% de cuota de pantalla. La audiencia creció a partir de 2019 y alcanzó su pico máximo en la temporada 2020/2021, en la que promedió un 13.6% de share y reunió a 1,7 millones de espectadores. En cambio, está rindiendo peor en el curso actual, en el que avanza con una media del 12.4% de share y 1,3 millones de seguidores, según los datos que la consultora GECA ha facilitado a verTele.
- Audiencias de 'Viva la vida' por temporadas:
- Temporada 2016/17: 10.2% y 1.048.000
- Temporada 2017/18: 11.3% y 1.458.000
- Temporada 2018/19: 10.3% y 1.258.000
- Temporada 2019/20: 12.6% y 1.619.000
- Temporada 2020/21: 13.6% y 1.717.000
- Temporada 2021/22: 12.4% y 1.348.000
- MEDIA: 11.7% y 1.408.000
Aunque la audiencia del programa haya sido bastante irregular –con bajón entre 2018 y 2019 que le hizo volver a la casilla de salida–, lo cierto es que había conseguido una trayectoria ascendente en los dos siguientes cursos que en la actual temporada no ha podido refrendar.
Aún así, y no por su mérito sino por demérito del resto de la cadena en su conjunto, nunca antes se había dado una diferencia tan pequeña entre la audiencia del programa y la del canal. Viva la vida siempre ha tenido una cuota de pantalla inferior a la de Telecinco. Su mayor desigualdad se produjo en la temporada 2018/2019, en la que el programa, con un 10.3% de share, quedó muy por debajo del 14.6% que cosechó Telecinco. Es decir, entre ambos se dio una diferencia de 4.3 puntos a favor del canal.
La brecha se fue cerrando desde 2019 y se ha reducido a su mínima expresión en la actual temporada, en la que el magacín de Emma García promedia un 12.4% de share frente al 13.2% que acumula Telecinco: ya sólo les separan ocho décimas.
En los últimos meses no ha conseguido dibujar una línea ascendente. Arrancó la temporada en septiembre de 2021 con su mejor dato (13.1% de cuota) pero después marchó entre subidas y bajadas que, este mes de mayo, le dejaron con un escueto 11.6% de share.
- Audiencias de 'Viva la vida' en la temporada 2021/22:
- Septiembre 2021: 13.1% y 1.266.000
- Octubre 2021: 12.9% y 1.341.000
- Noviembre 2021: 12.2% y 1.456.000
- Diciembre 2021: 12.4% y 1.449.000
- Enero 2022: 12.6% y 1.523.000
- Febrero 2022: 13% y 1.478.000
- Marzo 2022: 11.7% y 1.329.000
- Abril 2022: 12.1% y 1.187.000
- Mayo 2022: 11.6% y 1.118.000
La progresión de Viva la vida se refleja también en los datos de su versión veraniega, para la que se confió en Sandra Barneda o Toñi Moreno como presentadoras sustitutas. También en este caso la tendencia era claramente positiva, con tres temporadas de ascenso continuado tras el bajón del verano de 2018. En 2021, su promedio se situó en un buen 13.9% de cuota, y a pesar de ello su contrato no será prorrogado ni tan siquiera para cubrir el periodo estival, ya que se despedirá en julio y su sustituto llegará en agosto.
- Audiencias de 'Viva la vida' en verano:
- Verano 2017: 11.5% y 1.058.000
- Verano 2018: 10.4% y 1.057.000
- Verano 2019: 11.9% y 1.161.000
- Verano 2020: 13.2% y 1.345.000
- Verano 2021: 13.9% y 1.298.000
- MEDIA: 12.2% y 1.183.800
Sin embargo, sus audiencias, a la vista de los planes de la cadena, resultan insuficientes para que Telecinco pelee contra el sempiterno Multicine de Antena 3. Por este motivo Mediaset ha decidido no renovar su contrato con Cuarzo (que ya sólo se encarga de La isla de las tentaciones) y probará suerte con otro formato similar que será responsabilidad de una productora de confianza como es Unicorn Content.
Un programa con identidad propia pero marcado por el 'espíritu Mediaset'
La fórmula de Viva la vida repite los esquemas de la factoría Mediaset. Aunque el magacín de los fines de semana tiene su propia identidad, guarda muchas similitudes con formatos como El programa de AR y Sálvame.
La sección de actualidad se despacha desde una mesa específica con la que se imprime cierta formalidad al debate de los comentaristas, algunos de los cuales participan también en la tertulia que analiza la crónica social. En esta sección destacan figuras como Terelu Campos, Ana María Aldón, Kiko Matamoros, Marisa Martín-Blázquez, Luis Rollán, Isabel Rábago, Makoke, Suso, Raquel Bollo, Juan Luis Galiacho, Alejandra Rubio y el siempre polémico José Antonio Avilés.
Aunque en su guion siempre están presentes las tramas del universo Mediaset –las que se gestan en los realities y programas de la casa–, Viva la vida tiene la mirada puesta en los eventos del fin de semana, a los que asisten sus carismáticos reporteros.
El magacín de Emma García también genera su propio contenido gracias a la presencia de varios tertulianos que tienen alguna vinculación con las tramas que más suelen interesar a las revistas y programas del corazón: la expareja Kiko Matamoros y Makoke; Ana María Aldón y su relación con el caso Rocío Carrasco; Terelu en representación del clan de Las Campos; y Asraf Beno como delegado del clan Pantoja.
El humor lo aportan los reportajes y las gracias de Torito (Quique Jiménez) –que ya expresó en 2020 su deseo de crecer profesionalmente–, y la sección de cocina está comandada por Javier Muñoz-Calero.
Cinco horas en antena dan para mucho, pero el equipo que lidera Emma García bajo la dirección de Raúl Prieto, pese a haber mejorado el rendimiento de Telecinco en esa franja, no ha acabado de dar con las teclas adecuadas para enganchar al público y alcanzar el nivel de exigencia de Mediaset.
La principal cadena de Mediaset parece saber que no le basta con unos pequeños retoques estéticos para remontar, sino que necesita una transformación casi radical para volver a crecer, y es ahí donde también entran en juego las productoras que batallan por repartirse su parrilla de programación.