‘Shameless’ 5x11 Review: todo es cuestión de genética

Por David MarañónDavid Marañón

Estamos a las puertas del final de la quinta temporada de ‘Shameless’. Como ya pasó en la anterior temporada, este episodio podría ser perfectamente el season finale por sus historias finales, sus cierres y ese final de capítulo. Sin embargo, debe ser que nos tienen algo preparado que puede poner patas arriba a la familia Gallagher. De momento, en este capítulo se han sacado el As más gordo que podían sacarse de la manga. No es ninguna muerte, no es una fuga, ni tampoco la vuelta de nuevo de Steve. Entonces, ¿qué?

(Cuidado, SPOILERS!)

Vuelve el huracán para seguir llevándose cosas por delante

Ian está bajo arresto militar por varios delitos considerados federales. Todos los Gallagher, que están empezando a tomarlo como costumbre, se reúnen para acudir a la vista en la cual les informarán de los años de cárcel que pueden caer sobre los hombros de Ian. Vemos a una familia destrozada que empieza a acostumbrarse a esa nueva situación que deben vivir con Ian. Ya en la sala de reuniones, un militar les pone al día de todo lo que puede acarrear el comportamiento de Ian. Fiona y el resto, como si Ian no estuviera delante, empiezan a narrar lo que es convivir con él, lo que sufre, y de quién lo ha heredado. Le hacen ver que es algo con lo que tienen que convivir, pero que es terriblemente duro. Piden aun así que le dejen en libertad ya que médicamente está reconocido como enfermo de bipolaridad.

Lo que nadie, ni si quiera yo, esperaba, era que el mayor apoyo de Ian no fuera Mickey, sino Mónica. Como leéis. Vemos que Mónica va a visitar a su hijo, y descubrimos que nunca perdieron el contacto. En una escena maravillosamente interpretada, Mónica le dice a su hijo que debe buscar apoyo en gente que le entienda, que sepa lo que vive, y no que se esfuerce en entenderle, porque eso le hace daño. Ian lo único que hace es mirarla, y desconsolado, llorar pensando en todo el daño que le hace a los demás.

Al día siguiente, Fiona y los demás van a buscar a Ian. En el cuartel reciben la gran noticia de que Ian ya no está bajo arresto. Sin embargo, no se encuentra allí: queda bajo la guarda de Mónica. Todos entonces se enteran de que su madre ha vuelto, y reciben la noticia con una terrible desolación. Lo siguiente que vemos es a madre e hijo haciendo autostop, subiendo finalmente a una camioneta con un perro y un señor. Le espera lo peor a Ian si va a tener a su madre como guía en la enfermedad y apoyo. Una pena.

Una reconciliación, dos declaraciones y un no entiendo nada

¡Por fin! La temporada no podía acabar con Vero y Kev sin reconciliarse. ¿Cómo lo consiguen? Una tubería se rompe en el Alibi, y ambos deciden ir a arreglarla. Una vez allí, comienzan por fin a decirse lo que tenían guardado y lo que han hecho el uno sin el otro todo este tiempo. Tras varios reproches y ataques de sinceridad, Vero le confiesa a Kevin que necesitaba sexo y sentirse atraída, y Kevin le confiesa haberse masturbado tres veces con un vídeo porno casero que tenían, cosa que Vero toma como un detalle precioso, y acaban teniendo sexo sobre la mesa de billar. Finalmente, ambos felices vuelven a su casa con más ganas que nunca de seguir juntos.

Por su parte, Fiona sigue sin saber qué quiere exactamente de Gus, y la figura de Sean no ayuda mucho. Tras un ataque de histeria, Fiona se corta la mano, y mientras Sean se la cura, ésta le cuenta todo lo que pasa con su hermano. Sean decide llevarle al cuartel, y a la vuelta, ambos deciden pasar la noche juntos hablando y cenando en el restaurante. Una vez allí, y de día, Sean le dice que no puede compararse lo que confía en él a lo que confía en su marido. Cuando ésta se duerme, Sean se dirige al baño y allí vemos como vuelve a drogarse. Fiona trastocando la vida de nuevo a alguien, esta vez inconscientemente, ya que ella se siente a su lado más segura y estable que nunca.

Frank sigue empeñado en conquistar a Bianca, que por su parte está obsesionada con el peligro. Toda oportunidad de ver pasar su vida en un segundo es aprovechada por la joven doctora, que decide vivir la vida al límite. Frank comienza a tener miedo, incluso corre peligro – casi se cae de una azotea o muere arrollado por un tren mientras practica sexo con Bianca – por lo que decide avisar a la familia de Bianca para que la lleve al hospital. Lo que considera un gesto precioso para con la doctora, resulta ser su sentencia de muerte a los ojos de Bianca, que decide escapar e irse a Costa Rica. Finalmente, Frank le pide acompañarle y hacer que no se sienta sola en su muerte, y se va con ella.

En cuanto a la relación de Lip con su profesora, sigue metido en el triángulo amoroso en el que se ha visto envuelto, sólo que el marido de ésta empieza a sentir algo de celos por Lip, que empieza a ponerse su ropa y a darle un poco de lado. Acuden a una fiesta donde la profesora le presenta a un hombre que trabaja en una empresa aeroespacial, hombre con el que Lip hace muy buenas migas. Aun así, el Gallagher mayor no entiende absolutamente nada de lo que está pasando, y le da demasiado miedo dejarse llevar. Veremos a ver cómo acaba.

Sammi, el enemigo a batir en el campo de batalla

Mickey y Debbie hacen piña – desde la pedida por parte de Debbie de que se encargara de Ian, creo que ambos van a hacer muy buenas migas y darnos momentos magistrales – y deciden ir directamente a por Sammi, culpable directa de que los militares fueran a por Ian a casa. Aunque Fiona les advierte que no quiere torturas a Sammi, Mickey droga a la hermana mayor Gallagher. La idea es que al despertar, tenga cables enganchados a los pezones y le den descargas. Sin embargo, cuando van a buscarla, la encuentran muerta. Ambos deciden deshacerse de ella y enviarla en el contenedor de mudanza que Sammi estaba preparando. Cuando todos dábamos por hecho que estaba muerta, oímos que despierta en el contenedor y que al menos se han podido librar de ella por unos días.

En el próximo capítulo, el season finale, veremos cómo le va a Ian con su madre Mónica, cómo les va a Frank y Bianca en Costa Rica y, sobre todo, cómo seguro nos sorprenden con un final que nos deje con ganas de muchos más Gallagher.

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Por David MarañónDavid Marañón

Estamos a las puertas del final de la quinta temporada de ‘Shameless’. Como ya pasó en la anterior temporada, este episodio podría ser perfectamente el season finale por sus historias finales, sus cierres y ese final de capítulo. Sin embargo, debe ser que nos tienen algo preparado que puede poner patas arriba a la familia Gallagher. De momento, en este capítulo se han sacado el As más gordo que podían sacarse de la manga. No es ninguna muerte, no es una fuga, ni tampoco la vuelta de nuevo de Steve. Entonces, ¿qué?