Todos contra 1 completó este jueves su segunda entrega en La 1. Eso sí, el nuevo concurso de la cadena pública lo hizo con algún que otro contratiempo que condicionó su emisión y el seguimiento de la misma.
Cabe señalar, con respecto a esto último, que el comienzo del programa se retrasó hasta las 23:35 horas por la prórroga del Real Madrid-Atlético de Madrid de la Copa del Rey. Un imprevisto que La 1 ya se arriesgó a padecer la semana pasada, cuando programó el estreno justo después del Villarreal-Real Madrid, pero que entonces no padeció (empezó a las 22:55h) gracias a que la eliminatoria de octavos entre el 'Submarino amarillo' y el equipo de Carlo Ancelotti se resolvió dentro de los 90 minutos reglamentarios. Pero este jueves no ocurrió lo mismo, y Todos contra 1, al ser un programa en directo, tuvo que tirar hacia adelante y mantener la emisión.
Así las cosas, el formato conducido por Rodrigo Vázquez y Raúl Gómez arrancó poco antes de la medianoche y terminó a la 01:45 de la madrugada. Un horario que resultó inaccesible para parte del público y que, dificultó que el programa aprovechara el efecto arrastre tras el multitudinario derbi madrileño. De hecho, el concurso subió en cuota (del 9.6% del estreno pasó al 9.9%) pero bajó en espectadores (de 871.000 pasó a 737.000) como consecuencia de este tardío inicio.
Un problema técnico marcó la emisión
Para más inri, durante la noche también hubo un problema técnico. En cada prueba se realiza un reto, a menudo físico, cuyo resultado es una respuesta numérica a la que el concursante central y los espectadores deben acercarse lo máximo posible para acumular el dinero que hay en juego en dicha prueba. Pues bien, la barra que indica entre qué dos números ganaría la audiencia falló este jueves.
“Para los que nos hayáis visto el pasado jueves, este es un programa en directo, como sabéis, y hoy precisamente igual echas de menos Paula esa barra, esa franja roja, que indica dónde ganaría España y dónde ganarías tú”, explicó a los espectadores y la mencionada concursante central Rodrigo Vázquez, que tiró de tablas para seguir adelante. El programa, mientras tanto, optó por poner la respuesta de la audiencia en pantalla del plató. Así hasta que, en torno a la hora y cuarto de emisión, la barra comenzó a funcionar correctamente. “¡La barra ha vuelto! Enhorabuena a los compañeros, que están trabajando ahí duramente para poder contar con todos los medios”, celebró el presentador.
Por si todo esto no fuese suficiente, parte del público cargó contra Norma Duval, invitada en esta segunda entrega, por ralentizar el ritmo de una de las pruebas. En concreto, una en la que la vedette y otros participantes tenían que coger carrerilla, saltar sobre una cama elástica e intentar ponerse en el aire unos pantalones gigantes que las otras invitadas de la noche, Lorena Castell y Toñi Moreno, estaban justando con las manos. Sin embargo, Duval se cayó y, en vez de levantarse al instante para no perder tiempo y dejar que otro participante intentara ponerse los pantalones, la invitada se quedó unos segundos tumbadas mientras se reía y abrazaba a sus compañeros, lo que causó malestar e indignación entre los espectadores.