Situación tensa al hacer preguntas incómodas

Un reportero de 'Ya es mediodía' denuncia amenazas al informar sobre una fiesta ilegal en Madrid

Redacción

Ya es mediodía sigue pendiente de las fiestas ilegales que se producen en el centro de Madrid cada fin de semana en plena pandemia de coronavirus. El magacín matinal de Telecinco ha visitado en la mañana de este jueves 11 de febrero el edificio en el que se organizó uno de estos eventos en los que se juntaron decenas de personas en pocos metros cuadrados.

Las imágenes de la fiesta fueron desveladas por el programa hace unos días gracias a una periodista que se infiltró en ella. Y este jueves, un equipo de reporteros ha vuelto al lugar de los hechos para recabar las impresiones de los vecinos.

La situación era indudablemente tensa. Aunque la mayoría no han tenido inconveniente en mostrar su enfado e indignación ante las cámaras, otros se han negado a hacer declaraciones y han evitado a toda costa el micrófono de Ya es mediodía.

Pero el momento verdaderamente delicado se ha producido cuando los reporteros han entrado al edificio para hablar con la persona que supuestamente vive en el piso en el que se realizó la fiesta. Puesto que Ya es mediodía no ha mostrado imágenes de cómo ha sido este primer encuentro, el periodista ha explicado los detalles.

La persona “ha negado la mayor”

“Os puedo asegurar que la situación que hemos vivido aquí los compañeros de prensa ha sido terrible”, ha comenzado su relato. La persona que les ha abierto la puerta “ha negado la mayor” y les ha pedido que se fueran.

Dadas las circunstancias, los reporteros han optado entonces por pedir opinión a otros vecinos, provocando así la reacción del susodicho. “La situación es tremenda: este hombre vuelve a salir por la puerta de casa, nos grita, nos amenaza y la situación termina con dos vigilantes de seguridad que nos echan rápidamente a la calle”, ha explicado el periodista.

El reportero de Ya es mediodía se pregunta “cómo alguien que no tiene nada que ver con la situación reacciona así con la prensa”. Y ha concluido su crónica con una reflexión: “En el reportaje que hicieron nuestros compañeros hay un vigilante de seguridad que se encarga de decirles a los chavales dónde está la fiesta. No entendemos por qué durante el fin de semana se les indica dónde está la fiesta, y cuando acudimos dos compañeros de prensa preguntando nos tratan de esta manera. Que cada cual en casa saquen sus conclusiones”.