El programa de Ana Rosa se ha hecho eco esta viernes de la disputa reciente entre Kiko Rivera e Irene Rosales contra Sálvame, después de que el programa haya insinuado que el hijo de Isabel Pantoja ha sido infiel a su pareja. Ella, por su parte, intervino en el formato este jueves, donde aseguró: "Todo tiene un límite. Dejadnos vivir".
En el plató de Sálvame estaba un hombre que había acudido a la fiesta de la que se mostraron unas imágenes de Kiko hablando con una joven. No obstante, su versión de lo sucedido, como el propio programa describió, fue “descafeinada”.
Ana Rosa Quintana, por su parte, ha sostenido en su programa que “se ha montado una película que no tiene ni pies ni cabeza”. “Que está un matrimonio, que está el marido, la mujer, que ella está hablando... Pues lo normal. ¿Qué pasa, que yo no puedo hablar con tu marido?”, ha planteado a Cristina Tárrega, presente en el formato matutino de Telecinco, que le ha dado la razón. “Es que es ridículo”, ha insistido la periodista.
La presentadora ha definido a estos 'testigos' más adelante como “policías que salen de repente espontáneos”, acusándoles de “querer aprovecharse de cualquier situación”. “Tenemos por todas partes a viejas del visillo”, ha concluido.
Rosales, a 'Sálvame': “Mis hijas tiene que seguir viendo esto”
Después de que Sálvame contactara con distintos testigos de la citada fiesta, que aseguraron que Kiko Rivera besó a una mujer, el programa decidió “adornarlo” con imágenes de animales con cuernos y sonidos de ciervos. Contexto que motivó que Rosales decidiera llamar al programa.
La excolaboradora de Viva la vida, apartada por decisión propia del mundo de la televisión, intervino para zanjar la situación y avisar de que podría tomar medidas legales: “Aclaro que con mi marido está todo perfecto y que todo lo que ha salido... Mañana me reúno con mis abogados. Ir a un hotel a cenar a tomar una copa donde había una reunión... no pasa nada si hay una chica a su lado”.
Rosales lamentó la actitud del programa incidiendo en que “mis hijas tiene que seguir viendo esto”, y se enfrentó a él diciéndole a la presentadora Carlota Corredera: “Todo tiene un límite, habéis puesto como cebo el sonido de unos ciervos y como persona, me siento afectada. Entiendo el trabajo de todos, pero creo que todo tiene un límite”. Cuando la presentadora aludió a los supuestos testigos, Rosales fue directa: “Todos los que están diciendo mentiras van a ser denunciados”.
Repitiendo una vez más que no tiene ningún problema en su pareja, Irene Rosales aclaró que “A día de hoy estoy al 100% segura de mi marido. Ya le puse un límite”, y concluyó: “No estoy mal con mi marido. Dejadnos vivir nuestras relaciones como nos dé la gana”.
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