“En septiembre más, pero no mejor”, así se despidió El Intermedio en su último programa antes del parón veraniego el pasado mes de junio. Antes de pronunciar el adiós habitual del formato, Wyoming había dado la bienvenida a la nueva compañera de cara a la próxima temporada, Andrea Ropero. La aragonesa llega para sustituir a Gonzo, que a su vez ocupará el lugar de Jordi Évole tras su salida de Salvados.
Así, dos meses después, el formato de laSexta dará el pistoletazo de salida a su nueva temporada el próximo lunes 2 de septiembre, “que parece que no llega nunca” según reconoce en una entrevista a Vertele. La periodista llega después de haber protagonizado el emotivo homenaje que le brindaron sus compañeros de laSexta Noche, donde ha trabajado los últimos siete años.
Lampedusa será su primer destino en este nuevo reto en su carrera, donde acudirá a conocer la situación actual del Open Arms. Ropero se muestra enérgica de cara a su nueva aventura, en la que se encargará de realizar “reportajes y entrevistas sobre temas políticos y sociales”, ahora con el humor más presente, marca de la casa del programa liderado por Wyoming.
¿Cómo afronta esta nueva etapa como parte del equipo de 'El Intermedio'?
Muy bien, con muchísima ilusión, ganas y deseando empezar ya el lunes que parece que no llega nunca.
¿Cómo surgió su incorporación al programa?
Fue una propuesta de Globomedia y la cadena. No me lo esperaba pero me pareció un proyecto apasionante, en el que creo que encajo muy bien y al que me apetecía mucho sumarme para hacer entrevistas políticas, sociales, y reportajes. Seguir analizando la actualidad desde otro plató, otro programa, pero al fin y al cabo haciendo periodismo.
¿Cuál va a ser su papel?
Grabar reportajes y entrevistas políticas y sociales. Daremos también voz a toda esa gente que lo pasa mal, todos los temas a los que los políticos a veces miran de reojo. Iré allí donde está la noticia. Esa también es la base de El Intermedio: analizar la actualidad desde otro prisma pero siempre estando en las noticias importantes. Después iré a plató con Wyoming y con Sandra Sabatés para comentar los reportajes.
Aunque vaya a seguir conectada con la actualidad, ahora el humor va a jugar un papel más importante. ¿Cómo lo afronta?
Me apasiona el humor, si no no habría dicho que sí. He sido espectadora del programa desde el minuto uno. Por eso me alegré tanto cuando me lo propusieron. El intermedio se caracteriza por analizar las noticias con ese humor y esa ironía, por cierto tan necesaria hoy en día. Pero más allá de eso, cuando hay que ponerse serios, nos ponemos serios y llevamos la información al espectador para que ellos la valoren. Igual que cuando hay que hacer un reportaje como el primero que voy a hacer desde Lampedusa, donde grabaremos lo que está pasando allí con los inmigrantes y con el Open Arms.
Viajamos para comprobar cómo es su día a día. A veces hay picos informativos cuando ocurren determinadas tragedias, cuando pasan cosas como las del Open Arms, pero luego las cámaras se van porque hay otra actualidad, pero allí siguen dejándose la vida miles de personas. Vamos a ver cómo ha vivido la tripulación del barco todo lo que ha pasado este verano, entrevistaremos al alcalde de Lampedusa, a activistas, a inmigrantes del centro de acogida. Este es mi primer reto.
Da el salto de un programa semanal (laSexta Noche) a uno diario, ¿cómo le sienta el cambio?
Muy bien, porque cuando eliges ser periodista no tienes horarios. Tan pronto puedes estar en un programa de fin de semana como en uno diario. Es verdad que ahora no voy a trabajar los sábados, cosa que no echaré mucho de menos, aunque sí al equipo y al programa. Me incorporo a otro que funciona de otra manera porque es de lunes a jueves, pero el trabajo es lo que importa más allá de los horarios y los formatos. Me van a tener al pie del cañón.
Comentaba que la ironía era hoy en día necesaria, ¿cómo cambia el humor la manera en la que le llega la información al espectador?
El humor es imprescindible por mucho que algunos políticos se lo quieran no sé si cargar, pero sí pisotear. Es tan imprescindible como lo es la libertad de expresión. Hay veces que si la información se da con ironía pasa mucho mejor. Evidentemente hay temas de los que no te puedes reír, pero El Intermedio lo hace de forma magistral. Por eso tiene el éxito que tiene y por eso llevan ya más de 2.000 programas.
Volver a estar “a pie de calle” tiene quizás más que ver con temporadas anteriores de su carrera. ¿Lo ve así?
Sí, durante siete años fui redactora de laSexta Noticias en Barcelona. Hice muchísimos reportajes sociales, políticos y entrevistas. En parte en laSexta Noche también he salido a mucho a la calle, como al Congreso de los Diputados cuando ha habido investidura por ejemplo.
Dado que tiene experiencia en ambos escenarios, ¿cómo cambian en concreto los políticos dependiendo si la entrevista es en plató o en la calle?
Todo depende de si tienen ganas de hablar o no. Según el tema se paran y te contestan amablemente. Si la pregunta les incomoda un poco más, salen corriendo o incluso te dan un manotazo al micro, como me pasó a mí con Celia Villalobos. Nuestra labor es preguntarles lo mismo, insistir lo mismo y ser igual de incisivos les tengas delante en una silla o en la calle bajando de un coche. El formato no tiene que cambiar la forma de hacer periodismo ni de enfrentarte al político.
¿Ha hablado con Gonzo? ¿Le ha dado algún consejo?
Sí. Fue de hecho fue una de las primeras personas con las que hablé cuando me ofrecieron entrar en El Intermedio. Somos vecinos, además. Le pedí que me diera algún consejo y me dijo que de eso nada, simplemente que disfrutara porque me lo iba a pasar muy bien. Por lo que con ese cometido voy.
Su incorporación suma una nueva mujer a la plantilla de 'El Intermedio'. Dado los años que lleva ejerciendo su profesión, en gran parte en televisión, ¿como describiría este mundo hoy para una periodista?
Creo que es evidente que se ha avanzado muchísimo. Tengo la fortuna de llevar trece años trabajando en una cadena como laSexta, que siempre ha apostado por las mujeres. Es verdad que eso te facilita mucho las cosas y es un orgullo.
Mujeres periodistas hay muchas, maravillosas, y cada vez más, afortunadamente. Aunque hay que superar viejos clichés, los comentarios cuando se pone en duda a veces la profesionalidad de una presentadora por el hecho de ser mujer. Me parece lamentable y vergonzoso, porque aquí nadie duda de la profesionalidad de un presentador hombre y sin embargo sí de la de una mujer. Eso hay que superarlo de una vez por todas.
En su caso, además, dio las Campanadas en 2015 junto a Chicote, día en el que parece que el foco está puesto aún más si cabe, especialmente en el vestuario que elija ella. ¿Cómo lo vivió?
Dar las Campanadas es una de las mejores experiencias que he vivido en laSexta. Fue una noche inolvidable y me puse lo que me dio la gana. Y si volviera a presentar las Campanadas volvería a ponerme lo que me diera la gana, porque está en mi libertad de ser mujer. Luego lo que la gente opine, allá ellos. Soy mujer, soy una persona libre y nadie tiene que decidir por mi.
Ahora que ha pasado un mes desde su emotivo adiós a 'laSexta Noche', ¿le ha dado tiempo a asimilarlo?
Vaya llorera, no podía parar de llorar. Al día siguiente volví a ver el vídeo en el móvil, porque al final en el directo estás como en una nube pero dio igual, me puse a llorar otra vez. Fue muy emocionante porque han sido siete años maravillosos.