El periodista Andrés Gil ha renunciado este domingo a que su nombre sea propuesto formalmente como presidente de RTVE. “Mi nombre como presidente de RTVE podía tener sentido si suscitaba un acuerdo amplio para contribuir, de forma transitoria y hasta que se produzca el concurso público, a una RTVE con independencia, pluralidad y credibilidad”, escribe Gil en un artículo publicado en eldiario.es, donde actualmente es jefe de Política. “Pero sin el apoyo de los trabajadores y sin consenso parlamentario resulta imposible”.
La propuesta de Andrés Gil nace de un pacto cerrado el jueves por la noche entre PSOE y Podemos, que previamente habían barajado otros nombres. La reacción crítica de los trabajadores de RTVE, que piden un presidente de dentro de la casa, y el rechazo del PNV y ERC han hecho tambalearse el acuerdo durante los últimos días.
Este sábado, Moncloa pedía a Pablo Iglesias un acuerdo diferente, con otra persona que pudiera pertenecer a la actual estructura de trabajadores de RTVE. Podemos, por su parte, insistía en que “Andrés Gil no es el candidato de Podemos, es un candidato consensuado con el PSOE. Es el real decreto del PSOE y Pedro Sánchez tiene que buscar la mayoría”, decían este sábado fuentes de la dirección de Podemos, cuya primera opción había sido la periodista Ana Pardo de Vera, según ha confirmado tanto Pablo Iglesias como ella misma.
“Agradezco”, explica Gil en su comunicado, “todas las muestras de apoyo recibidas por parte de tantos y tantos compañeros, colegas y amigos, todos aquellos que creyeron hasta el final en mi persona para contribuir a que, desde ya y para siempre, RTVE sea #DeTodxsYdeNadie”, una expresión que Gil repite en diferentes ocasiones del artículo y que fue utilizada por los trabajadores de la Corporación el pasado viernes en una nueva jornada de protestas.
Este mecanismo de nombramientos viene dado por el decreto del Gobierno para desbloquear RTVE, que fuerza al Congreso y Senado a nombrar un nuevo consejo de 10 miembros y que trabajarán de manera interina hasta que salga adelante el concurso público cuya pluralidad peligraba tras un pacto entre PP y Ciudadanos.
Si no hubiera una solución interina, si no se llegara a un acuerdo para los nombramientos, “la cláusula de cierre sería un administrador único provisional”, explicó el Gobierno al hacer público hace dos semanas el decreto para forzar el desbloqueo de RTVE.
Ahora, el Gobierno busca un nombre de dentro de RTVE tras las críticas al pacto con Podemos para elegir presidente. El plazo para comunicar la nueva candidatura se cierra a las 12 de la mañana de este lunes.