Esta semana le llegó la hora a Arturo Valls en El cielo puede esperar de Movistar+. La nueva entrega mató al presentador por no ser capaz de aguantarse un chiste, y así se inició su funeral.
Un acto cargado de valencianidad que contó con numerosos rostros televisivos que habían pasado por la vida del protagonista: desde el Gran Wyoming, a Gonzo, Antonio Pagudo, Marta Belenguer y Carlos Areces, entre otros.
“Parece que no pero te emocionas aquí” acabó diciendo Valls al escuchar los discursos de sus seres queridos que le enternecieron tanto como hicieron reír.
Antonio Pagudo: “A Arturo no le importaba el dinero, de hecho producía películas en las que él aparecía”
El peculiar sepelio arrancó al ritmo de Al partir un beso y una flor de Nino Bravo, escogido por el propio Valls. Dani Piqueras, que ofició el acto, empezó la despedida con el característico humor negro del programa: “Decimos adiós al hombre de las mil caras que dedicó su vida a hacer reír. No hacía una paella mala, ojalá le hubiera dedicado el mismo esfuerzo a hacer humor. Voy a pediros una cosa que Arturo nunca consiguió que es estar un minuto callado”.
El primero en hablar fue El Gran Wyoming, que con altas dosis de sinceridad rememoró el primer día de Valls en Caiga quien Caiga: “Voy a intentar ser sincero. Arturo a mí no me caía bien. Le llamaron para el CQC cuando yo estaba un poco crecido y cuando apareció el primer día yo tenía que ir a la presentación de una revista en la que había quedado con una modelo y él vino conmigo. Sin conocerlo de nada. Lo primero que dijo aquella mujer fue que hacía tiempo que no le presentaban a un hombre realmente guapo”. Para acabar parafraseando a Franco: “Como dijo Franco cuando murió Carrero Blanco, 'No hay mal que por bien no venga'”.
Le siguió el actor Antonio Pagudo que hizo referencia a las dotes intepretativas de Valls: “A Arturo no le importaba el dinero, de hecho producía películas en las que él aparecía. No le importaba el dinero”.
El éxito de Arturo con las espectadores de la tercera edad
También subió al atril su socio Félix Tusell que recordó cuando el “ministro de cultura le pidió una foto porque su hija era muy fan y él encantado porque por una vez era la hija y no la abuela”. Sobre ese mismo éxito con las espectadores mayores fue el discurso de Joaquín Reyes y más tarde el de Juan Ibáñez (la hormiga Trancas): “Se han declarado tres días de luto oficial en Galerías del coleccionista”. Y acababa haciendo un guiño a su propio trabajo: “Tú que has presentado tantos concursos sabes que a veces se gana y a veces se pierde. Esta vez has perdido pero te llevas este fuerte aplauso”. Y toda la sala aplaudió.
Gonzo recordó las Falls juntos, la actriz Marta Belenguer habló de sus fiestas nocturnas, Emilio Aragón, Karlos Arguiñano, Susanna Griso y Juanra Bonet enviaron un vídeo porque le apreciaba pero “no tanto como para desplazarse hasta allí”. Y Carlos Areces comentaba que todo “era mentira”.
El funeral contó con números musicales de Delaporte, los raperos Locoplaya -uno no de sus grupos favoritos - y cerró con Chimo Bayo.