Ayuso no habló en Mediaset de su pareja, pero sí de su excusa con la fruta tras llamar “hijo de puta” a Sánchez
Este lunes, Isabel Díaz Ayuso se sentó frente a los 30 “reporteros” de 100% Únicos de Cuatro para responder a sus preguntas. A raíz de todas ellas, habló de política, de su paso por la cuenta del perro de Esperanza Aguirre y pasó de puntillas por las explicaciones relacionadas con su hermano y su pareja.
Cabe recordar que, el formato en principio se emitía en Telecinco pero desapareció de la parrilla tras dos entregas con una audiencia insuficiente. No volvieron a tenerse noticias sobre él hasta el pasado marzo cuando, con la presidenta de la Comunidad de Madrid en el ojo del huracán informativo tras salir a la luz las investigaciones de elDiario.es sobre su pareja, Mediaset lo sacó del cajón y retomó la promoción.
Por lo que esta entrega era una de las más esperadas, a pesar de haber estado grabada el pasado invierno, como ella misma señaló al responder “qué fruta es la que más le gusta”. Así empezaron a lanzarle cuestiones sobre el momento en el que llamó “hijo de puta” al presidente Pedro Sánchez y ella esquivó la palabra, una vez más, asegurando que su “fruta favorita dependía de la estación del año”.
Argumentó lo ocurrido de la siguiente manera: “Fui al Congreso un día, estaba en el debate de investidura Pedro Sánchez y dijo una cosa muy ofensiva y para mis adentro dije ”me gusta la fruta“, nos podíamos llevar mejor, pero ahora mismo... ”, se excusó al recordar su reacción ante las declaraciones del presidente sobre las comisiones que cobró su hermano de contratos con la administración madrileña durante la pandemia.
Sobre ese hermano también le preguntaron y ella lamentó haberle complicado la vida: “Desde que entré en la presidencia le perjudiqué, las cosas le han ido a peor. Desde que estoy en política su vida ha empeorado”.
Algo que fue muy unido a la siguiente cuestión que le lanzaron, sobre la razón de no hablar mucho de su pareja, Alberto González Amador : “Si empezamos a hablar de vida personal cuando las parejas no son públicas, al final ellos se convierten en noticia”, dijo y zanjó el tema. Una respuesta que hacía, como hemos mencionado anteriormente, antes de saltar a la luz toda la investigación a González Amador por un fraude fiscal de más de 350.000 euros tras enriquecerse en la pandemia vendiendo mascarillas.
Investigación que se conocía a principios de año y sobre la que ahora, la pareja de Ayuso no solo admite que defraudó a Hacienda por valor de 350.951 euros en dos ejercicios sino que también se sirvió de una trama de facturas falsas para ejecutar el engaño y pactó no entrar en la cárcel.