Análisis

La 'batalla de magacines' se duplica ahora en la tarde con Sonsoles, Ana Rosa y Jordi González

Esta semana es importante para la parrilla televisiva, especialmente de La 1 de TVE, pero por competitividad también para el resto de cadenas generalistas. Y es que la cadena pública despliega definitivamente las apuestas para sus nuevas tardes, como ya hemos analizado, con dos nombres propios: La Moderna, su nueva serie que hará tándem con la exitosa La Promesa, y sobre todo La Plaza, su nuevo magacín.

La serie La Moderna llega con la novedad de emitirse antes, y no después, de La Promesa, lo que supondrá un cambio de orden en la franja que La 1 dedica a la ficción nacional. Pero tras su experiencia con otros títulos, supondrá mantener esa apuesta. La verdadera revolución es que TVE vuelva a apostar por un magacín de tarde, además a cargo de un fichaje de relumbrón como Jordi González.

El formato nace mediáticamente un poco “con gafe” porque no ha podido ser presentado ante la prensa pese a tener dos convocatorias: la primera durante el reciente FesTVal de Vitoria fue cancelada por el especial Lazos de sangre sobre María Teresa Campos que presentó Jordi González, y la segunda el 19 de septiembre también fue cancelada 24 horas antes sin explicación. Así que lo que sabemos de él se ha ido conociendo con cuentagotas: una nota de prensa para anunciar su estreno y plantel de colaboradoras (todas mujeres), y una visita del presentador a Mañaneros para desvelar detalles.

En esa entrevista con Jaime Cantizano, el propio Jordi González explicó que cada tarde va a reunirse en directo “con mujeres que tienen cosas que decir”, con las que va a “hablar de lo que la gente habla durante el día”. Además de comentar el fichaje de Terelu Campos, que además será protagonista del estreno con la primera entrevista en plató tras la muerte de su madre María Teresa Campos, el presentador también desveló que en La Plaza “la música va a ser muy importante”, explicando que cada día concluirán la emisión con “una canción dedicada”: “Todo el mundo tiene una canción. Vamos a terminar cada tarde con la petición de una canción, con la particularidad de que veremos el momento en el que esa canción sonó por primera vez en TVE”.

La 'batalla de magacines', ahora también en la tarde

Tanto por duración (se alarga “sólo” una hora, de 18:30 a 19:30 horas) como por esa concepción más de tertulia, La Plaza llega aparentemente diferenciándose de sus rivales, con los ojos puestos en la nueva “batalla de magacines” que ahora se producirá en la tarde, pero con diferencias importantes entre formatos y emisiones.

Y ahora Sonsoles parte con ventaja porque ya tiene una temporada de experiencia, porque es líder habitual de su franja, y sobre todo porque Antena 3 le dispensa un especial cuidado casi único en toda la parrilla de las generalistas: actualmente vuelve a emitirse sin publicidad, como en sus primeros meses. Es algo vital que logra que el público no desconecte cuando Sonsoles Ónega pasa a los anuncios, evitando que recurra al zapping y no regrese o tarde en volver, y así mantiene en alto sus datos.

Además, su franja de emisión va de las 18:00 a las 20:00 horas, lo que le hace “contener” dentro de sí a La Plaza, pero ser a su vez menos extenso que TardeAR. Además, el programa no es sólo una tertulia de actualidad como parece ser La Plaza, sino que tiene más diversidad y amplitud temática, con especial atención a los sucesos, el corazón y la salud.

TardeAR es la gran novedad de Telecinco y en su primera semana, como hemos analizado, no ha cumplido las expectativas. La esperada llegada de Ana Rosa Quintana a las tardes sigue testando contenidos y esta segunda semana se ha lanzado más a la política, a pesar de que en mayo el consejero delegado de Mediaset, Alessandro Salem, aseguró que en el programa “no habría política”.

El magacín de Unicorn es el más largo de todos, cada día entre las 17:00 y las 20:00 horas. Es decir, que dentro de su franja estarán incluidas las competencias con los otros dos, lo que permitirá a todos intentar sacar el titular de audiencias positivo según sus diferentes emisiones. Y sus contenidos se asemejan más a los de Y ahora Sonsoles, como un magacín al uso y no sólo centrado en la tertulia como La Plaza. Su principal problema es el “continuismo” que marca la misma productora y la misma cadena respecto a la mañana con La mirada crítica y Vamos a ver.

La Plaza, como decimos, llega a La 1 de TVE con cierto secretismo y una apuesta que parece diferenciarse de las otras dos, además de un horario más reducido. Ambos condicionantes no tienen por qué ser positivos: al ser un formato más contenido también es más fácilmente prescindible de la parrilla para la cadena, y si la tertulia pura no funciona deberá virar hasta “parecerse” más a sus rivales.

Justo ese punto es lo más llamativo de las nuevas tardes televisivas: ahora todas optan por magacines, igual que en la mañana. Durante muchos años, Sálvame ejerció un control férreo de la tarde que provocó que el resto de cadenas plantearan alternativas diferentes como series y concursos, resignándose a lograr como máximo la segunda porción del pastel de las audiencias. Pero el desgaste del formato, y la evolución del consumo y la fragmentación ha hecho que se prefiera una configuración más dividida y con distintas ofertas que se diferencien de las plataformas: series diarias, concursos, magacines en directo, espacios de divulgación...

Esta temporada, lo cierto es que el trono de las tardes arrancó, y sigue, sin tener un dominador claro. Las tres grandes cadenas generalistas se lanzan a competir con diferentes apuestas, y destaca la revitalización de los magacines de tarde. Desde este miércoles empezará a evaluarse el rendimiento especialmente de Antena 3, Telecinco y La 1 de TVE, sin olvidarnos, como comentó Sonsoles Ónega al presentar su nueva temporada, que no estarán solos... y que todos podrían ir a por lo mismo: “Seremos cinco magazines a la vez y, cuando haya una noticia importante, estaremos los cinco con lo mismo”. Habrá que ver si hay diferencias, o las cadenas optan por parecerse demasiado las unas a las otras.