Se siente o no en sus platós, o los critique vivamente, Kiko Rivera sigue generando horas de contenido para Telecinco. Durante los últimos días, la relación entre el DJ y la cadena se ha tensado cada vez más, con los ataques y acusaciones del primero en redes sociales y con los programas de la casa cuestionando su actitud y sus motivos. Todo ello, mientras sobrevolaba la duda sobre si todo terminaría con el hijo de Isabel Pantoja sentándose en el Deluxe este pasado sábado 16 de octubre.
No fue así, claro. De hecho, ni el formato anunció que se produciría esta visita, ni el famoso acudió a los estudios de la cadena. Ahora bien, desde Telecinco se cuestionaba que no hubiera sido por falta de ganas. Este lunes 18, Alessandro Lequio aseguraba que si Rivera no pasó por Deluxe por un motivo económico. “No se siente violado en su intimidad, sino en su bolsillo, al habérsele frustrado la última exclusiva que estaba negociando”, ironizó el primero. Horas más tarde, Belén Esteban ha corroborado y secundado esta versión.
“No sigáis insistiendo en que vaya porque no lo voy a hacer”. Sálvame recordaba una de las frases que había escrito en redes sociales Rivera, dirigida directamente al espacio de La Fábrica de la Tele. A esas palabras contestaba la tertuliana, que da la vuelta a la situación: “Que diga la verdad. Se le llama y dice que viene, y pide dinero”.
“Me parece muy bien lo que pide y si se le da me parece muy bien”, continúa Esteban, si bien recalca que “a la producción [lo que pide] le parece excesivo”. “Que no diga que le dejen de llamar cuando quiere venir por un precio”, añadió, antes de gritar a los cuatro vientos que el caché que Rivera demandó por su intervención se cifraba en 60.000 euros.
Rafa Mora lo defiende: “No fue solo por la tela”
Rafa Mora, amigo íntimo de Rivera quiso matizar que el rechazo de la propuesta de entrevista “no fue solo por la tela: ”La pasta que has dicho las tres anteriores ocasiones se la han dado, y un poquito más“, comentaba el colaborador aludiendo al dinero que Kiko ingresó por la serie de especiales Cantora. La herencia envenenada, en los que se escenificó el cisma con su madre, Isabel Pantoja, con la que ahora publicita su reconciliación. ”En el momento en que se empezó a decir que le había sido desleal a Irene [Rosales] siendo mentira, se empezó a calentar“.
Mora se refiere así, como posible detonante para el desencuentro en las informaciones que difundió el programa de las tardes sobre una supuesta infidelidad a su esposa, ante lo que Rivera: “Sé que estáis cortitos de audiencia, sé que vuestro programa se va al carajo. No me llaméis más, que no voy a ir”, dijo el famoso entonces.
A partir de ahí, comenzaron sus comentarios despectivos en redes sociales no solo contra Sálvame sino también con otros programas de la misma productora como Socialité. Este mismo fin de semana, el que fuera coprotagonista de Torrente 4: Lethal Crisis cargó no solo contra el magacín de las mañanas de los fines de semana de Telecinco, sino contra la reportera a la que se encomendó acudir a la calle donde él vive.
Si bien Mora afeó la conducta de su amigo, sí trató de justificar la actitud de este: “Él no lo está pasando bien, y se nota que está alterado por muchos motivos”, continuaba su amigo, que señalaba la responsabilidad del programa. “Aquí Kiko Rivera era el mejor y se le jaleaba para que viniese [...] De un día para otro, siendo la misma persona, de ser la víctima ha pasado a ser verdugo”.