José Antonio Canales Rivera ha reaparecido en Sálvame apenas cuatro días después de haber sufrido una cornada durante la corrida de toros celebrada el pasado viernes 26 en Retuerta de Bullaque (Ciudad Real). El torero, colaborador recurrente del programa, ha entrado por conexión desde la habitación donde se recupera tras las intervenciones para contener una hemorragia localizada en la zona testicular, a consecuencia del desgarro ocasionado por el asta de toro.
“Voy evolucionando favorablemente, dentro de mis curas que son terribles. Me duele horrores”, reconocía a Adela González, ante la que se tomaba con filosofía el percance. “Estas cosas son así. Cuando uno se pone delante de los toros es lo normal que puede pasar”.
Contó qué sintió en la cogida
Sobre el percance, recuerda sentir “cómo se me abren las carnes”. Aseguró haber sido consciente del alcance de la cornada: “No es la primera vez que sufro una en la zona escrotal, es la cuarta vez. Cuando me levanto del suelo, voy un poco perdido, hay un instante que miro hacia atrás intentando darme la vuelta para terminar lo que he empezado... Pero cuando veo que me duele y que me baila, digo: ‘vámonos para dentro'”, repasa.
Añade que su familia ha estado arropada por sus primos Cayetano y Fran Rivera, hijos de Francisco Rivera y Carmina Ordóñez, y de Kiko Rivera, hijo de Paquirri e Isabel Pantoja. “En estos casos [estamos] haciendo un poco de piña”, agrega.
María Patiño no dudó en preguntarle por las posibles consecuencias de la cogida, que tuvo lugar en sus partes íntimas. “Hasta el momento todo va bien. Me encantaría que pasado lo que estoy pasando esto sea solo una anécdota”, ha asegurado el torero, que no se ha planteado retirarse de la tauromaquia.