Los candidatos seleccionados para formar el nuevo Consejo de Administración de RTVE han denunciado en el Congreso que “no hay excusas” legales para mantener congelado el concurso público y han exigido su reactivación en las próximas semanas.
Este proceso, fruto de una reforma legal consensuada por PP, PSOE, Unidas Podemos y Ciudadanos, lleva parado desde hace casi un año, cuando se disolvieron las Cortes por la convocatoria de elecciones del 28 de abril.
El concurso se paralizó justo después de que se hiciera pública la lista de los 20 candidatos elegidos por un comité de expertos entre todos los aspirantes que se presentaron al concurso, como los más aptos a optar a los 10 puestos a renovar en el Consejo de la Corporación. La mejor calificada fue la periodista recientemente fallecida Alicia Gómez Montano, tal y como constaba en la lista publicada en diciembre de 2018.
Ahora, quince de estos candidatos preseleccionados han registrado en el Congreso un escrito dirigido a la presidenta de la Cámara, Meritxell Batet, con el objetivo de que constituya lo antes posible las Comisión Mixta (Congreso-Senado) para el Control Parlamentario de RTVE, que es la responsable de continuar con el concurso y resolver las cuestiones pendientes sobre el mismo.
Con esto, los aspirantes se refieren a los recursos que algunos de los participantes presentaron con respecto a la puntuación obtenida en el concurso público. Según han indicado los firmantes, estos recursos ya han sido valorados por los letrados de la Cámara baja y debe ser ahora la Mesa de la Comisión Mixta quien los resuelva. Se prevé que este órgano se constituya la próxima semana.
Quieren que “se cumpla la ley”
Con esta petición, los firmantes también rechazan las denuncias que aseguran que el concurso no puede seguir adelante con estos recursos en marcha. En este sentido, indican que el concurso “no está judicializado” y no hay “juicios pendientes”, por lo que “no parece lógico” que esté paralizada la elección. “Además, la normativa es sólida en este sentido y dice que estos recursos deben resolverse en tres meses, un plazo que ya ha vencido”, indica uno de los aspirantes, Juan Buhigas.
Tanto él, como su compañero Roberto Mendès han indicado que lo único que podría paralizar este concurso es una reclamación al amparo del Tribunal Constitucional a la normativa general del concurso. “Y esto no ha pasado”, indican.
Por eso, consideran que no hay excusas para que este proceso esté congelado y piden a Batet la constitución “en el menor tiempo posible” de los órganos para hacer “que la ley se cumpla”. Los candidatos también han mostrado ante los medios su preocupación ante la posibilidad de que el nuevo Gobierno no tenga “voluntad política” de sacar esta renovación adelante. En todo este periodo, han explicado, no se ha puesto nadie en contacto con ellos para tratar sobre el futuro del concurso.
Los expertos también pidieron la activación a Batet
“No sólo resulta necesario cumplir con la Ley pactada por consenso, sino que además resultaría una oportunidad para congresistas y senadores conocieran las ideas y los diferentes proyectos diseñados por los candidatos preseleccionados”, ha apuntado otro de los aspirantes, Agustín García Matilla, para quien este concurso es “imprescindible” para que la Corporación rinda cuentas a la sociedad y que esta se sienta “partícipe y orgullosa” de la Corporación.
Estas petición se une a la realizada en diciembre por el comité de expertos que eligió a los 20 aspirantes a formar parte del Consejo de Administración de RTVE.
Tal y como determina el reglamento de este proceso, esta veintena de candidatos deben pasar por las comisiones de Nombramientos de Congreso y Senado para ser evaluados por diputados y senadores, que al final del proceso son los encargados de votar los nombres.
Los nuevos miembros de la directiva de RTVE (seis a elección del Congreso y cuatro del Senado) deben contar con un respaldo mínimo de dos tercios de la Cámara en primera vuelta (al menos 233 diputados en el Congreso), y en su defecto mayoría absoluta (176 diputados) en una segunda votación. Eso sí, los candidatos en liza han de contar siempre con el aval de al menos cuatro grupos parlamentarios.
La presidencia de RTVE se debe votar en el Congreso en una segunda fase, de entre los diez consejeros ya aprobados. Esta figura requiere también dos tercios en la primera votación o, en su defecto, mayoría absoluta, tal y como recoge la normativa.