Karen entró en el restaurante de First Datesbuscando al amor de su vida. Para ello, se presentó a Carlos Sobera y le explicó que había dejado el trabajo de oficina para trabajar por la noche.
En concreto, haciendo “acrobacias en una barra vertical” con lo que prefirió un trabajo físico al sedentario anterior.
Sobera: “¿Te basta un tío como yo?”
Sobera, al escucharla, le dijo pícaro “estás físicamente impresionante como consecuencia de tanto ejercicio, eres una mujer musculada, fibrosa, ¿quieres que él sea así también o te basta un tío como yo?”
Y la soltera, halagada le respondía: “Me gustaría que fuera deportista, porque el estilo de vida es...”
“Ah, vale de acuerdo”, decía apenado y bromeando Carlos Sobera.