Carlota Corredera ha dejado algunas reflexiones en Sálvame sobre el “linchamiento” que ella y otros personajes públicos reciben en las redes sociales. Lo hizo este viernes en el programa que presenta y tras dar paso a un vídeo en el que se homenajeó a Verónica Forqué, cuya muerte, atribuida desde un primer momento al suicidio, ha generado un amplio debate sobre la presión que soportan personajes tan conocidos como ella.
En el reportaje, los compañeros de profesión de la actriz opinaron sobre los efectos de estas críticas desmedidas que, en ocasiones, pueden arruinar la carrera de las celebrities o acabar con su salud mental.
Al acabar el vídeo, Carlota lanzó sus impresiones: “De todo esto tenemos que aprender, aunque la desgracia es que se ha cobrado la vida de Verónica”. La presentadora de Sálvame, que ha sido muy criticada por sus mensajes de apoyo a Rocío Carrasco, considera que para tener un perfil en las redes sociales se debería exigir un DNI, de modo que así se podría reclamar al autor de los insultos o amenazas.
“Me parece terrible que en este país, porque salgamos en la tele, o porque Verónica Forqué estuviera en MasterChef, eso nos obliga a asumir que tenemos que recibir acoso e insultos. No sé en qué contrato existe la sentencia de que si eres un personaje público pueden lincharte públicamente todos los días y gratis”, lamentó la periodista de Telecinco.
Además, Carlota desveló que en su cuenta de Instagram tiene “un montón” de filtros para que los insultos “no salgan a la luz”. “Qué triste que tenga que poner en mi Instagram o en mis redes palabras claves para que no haya esos insultos, vejaciones y humillaciones. ¡Pero que es esto! ¡Qué país estamos haciendo!”.
“Está claro que las personas que salimos en la tele y tenemos perfiles públicos también tenemos que cuidar nuestra salud mental por las barbaridades que tenemos que leer cada día”, remató antes de dar paso a un vídeo en el que Ángel Martín y Mercedes Milá intercambian opiniones sobre sus experiencias con la depresión. Un día antes, también en Sálvame, Kiko Hernández se burló de del ataque de ansiedad que había sufrido Lydia Lozano.