El mediático doctor Pedro Cavadas ha recibido este miércoles el Premio de Honor de Mensajeros de la Paz en Valencia, de manos del padre Ángel. Y por ese reconocimiento, ha atendido en directo a Ya es mediodía, el programa matinal de Telecinco.
Sin embargo, su entrevista con Sonsoles Ónega ha sido mucho menos fluída y cómoda de lo que podría esperarse. La presentadora le ha lanzado una pregunta sobre la vacunación del coronavirus, un tema sobre el que Cavadas ha opinado mucho en los últimos meses, y éste ha dejado claro que se negaba a hablar de ello.
“Las vacunas, perdóneme, pero me dan igual. Yo soy cirujano, no experto en vacunas”, ha cortado de raíz en respuesta a Ónega, lo que ha generado un momento de notable incomodidad, que se ha alargado en el resto de la charla con el doctor diciendo que esta vez sólo quería hablar de su premio: “Citando a Don Francisco [Umbral], yo he venido a hablar de mi libro”.
Cavadas ni tan siquiera ha querido hablar de su propia experiencia de vacunación, normalizando y sin dar importancia a la vacuna: “Yo soy mayor, ya no tengo miedo de nada, es una vacuna, soy sanitario y había que ponérsela, la que hubiera… era la que sobraba, la de Moderna creo… La de fregar… La que tocara, imagino que son parecidas”.
La actitud del doctor ha dejado visiblemente contrariada a la presentadora, sobre todo porque Cavadas asistió hace medio año como estrella a El Hormiguero y en esa ocasión no tuvo reparos en seguir criticando la gestión del Gobierno del coronavirus, recordó que él avisó de lo que podía avecinarse y apuntó a la tardanza en dar respuesta, además de explicar por qué “no tenía interés” en conocer a Fernando Simón.
Entonces sí habló de la vacuna, poniendo en duda su fiabilidad. Dejó claro que para obtener resultados satisfactorios deberían pasar “años, no meses”. Por ello se ganó las críticas de una parte de la comunidad científica, calificándole de “irresponsable”. Uno de ellos fue el neurocientífico Pablo Barrecheguren:
Como también explicó elDiario.es, “lo que es inobjetable es que no es epidemiólogo”, como ahora deja claro Cavadas al decir que “yo soy cirujano, no experto en vacunas”. Y pese a ello, durante meses ha opinado sobre el coronavirus, generando sucesivas críticas entre un sector del colectivo sanitario no sólo por sus palabras, sino también por su actitud.
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