De chocolatinas a vetos: los tertulianos de 'Sálvame' desvelan las condiciones que ponen a la dirección del programa
En Sálvame siguen a vueltas con los supuestas condiciones que pone Rocío Flores para acudir a los platós de Supervivientes y El programa de Ana Rosa. Pero esta vez con un curioso giro de por medio. Después de hablar nuevamente del presunto veto que la hija de Rocío Carrasco y Antonio David Flores habría puesto a Belén Rodríguez, Kiko Hernández preguntó a sus compañeros de programa qué condiciones han puesto ellos, ya sea verbalmente o por escrito, a la dirección de Sálvame.
Algunos, como Paz Padilla y Antonio Montero, negaron haber puesto alguna exigencia en concreto. No así Belén Esteban, que reconoció que entre sus exigencias está no coincidir en un plató con Ángela Portero, a la que tuvo que indemnizar con 10.000 euros el pasado mes de abril por insinuar durante el paso de ambas por GH VIP 3 que la periodista consumía drogas. “Dije que me parecería muy bien que trabajara aquí, pero que a mí ese día me quitaran de trabajar. Y es más, esa señora en el juicio mintió y dijo que yo la había vetado en toda la cadena. Claramente está que ganó y se la pagó todo, pero trabajaba en Viva la vida y ahora trabaja con Sonsoles [Ónega, presentadora de Ya es mediodía]”, dijo la Esteban, que en ningún momento pronunció el nombre de Portero, pero sí lo hizo Kiko Hernández con su permiso.
A través de María Patiño, Lydia Lozano dijo que ella en su día pidió no compartir plató con Coto Matamoros durante su etapa en A tu lado. A su vez, la propia Patiño también desveló que Canales Rivera se incorporó a Sálvame bajo la promesa de que no se hablaría de su familia más directa, incluyendo la madre de sus hijos. Por su parte, Chelo García Cortés pidió, y aún pide, “protección para una persona, que no es Marta”.
En cuanto a las condiciones más livianas, las de Anabel Pantoja: agua fría y una chocolatina. “Es lo único que pido”, aseguró la sobrina de Isabel Pantoja. Por su parte, Belén Esteban es la única tertuliana que tiene garantizado que, año tras año, sus vacaciones caigan siempre en agosto. “Es cuando estoy con toda mi familia y me voy a ver a mi mama”, contó para justificar esta condición.
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