Cinco actuaciones reales de Eurovisión que inspiraron a la película de Netflix
Aunque el coronavirus obligara a cancelar Eurovisión, Netflix ha tratado de compensar a los eurofans con la película La historia de Fire Saga. En ella, Will Ferrell y Rachel McAdams se convierten en los particulares representantes de Islandia en el certamen. El abanico de momentos hilarantes en la comedia es tal que genera dudas sobre con ella David Dobkin rinde homenaje o parodia el festival.
Además de contar con seis ganadores de Eurovisión entre sus cameos (de Salvador Sobral a Loreen), algunas de las secuencias están inspirados en números reales.
- La rueda gigante
Cuando Fire Saga presenta su canción, Double Trouble, aparece en escena una rueda gigante que recuerda a la de los hámsters. Es una referencia a la actuación de la cantante Maria Yaremchuk, representante de Ucrania en Eurovisión 2014, con el tema Tick-Tock.
- La actuación demoníaca
Otro guiño a Eurovisión tiene que ver con una de las bandas que compite para representar a Islandia, Moon Fang, cuyos miembros están cubiertos por prótesis que les hacen parecer demonios y tocan hard rock y heavy metal. Es una clara referencia al grupo finlandés Lordi, que llevan trajes de monstruos y demonios y que ganaron el festival en 2006 con su canción Hard Rock Hallelujah.
- La canción de Dan Stevens
En la película, Dan Stevens interpreta a Alexander Lemtov, el representante de Rusia en Eurovisión. Lemtov se caracteriza por su tono de voz operístico. Tanto su melodiosa voz como su atuendo y el equipo de bailarines que tiene sobre el escenario tienen como inspiración la actuación del contratenor Cezar, que representó a Rumanía con el tema It's My Life en 2013.
- De Demi Lovato a Loreen
Uno de los mejores momentos del Eurovisión de Netflix es la actuación de Demi Lovato como Katiana, la aspirante que inicialmente iba a ser la representante de Islandia. Su puesta en escena está a la altura de muchas divas del festival, teniendo mucho parecido con la magnética actuación de la sueca Loreen y su Euphoria, con la que ganó el certamen en 2012.
- El toque vikingo millennial
Aunque 21st Century Viking no tuvo su momento eurovisivo en el festival, tanto su puesta en escena como su estética recuerdan mucho a la de la banda Rasmussen, que representó a Dinamarca en Eurovisión 2018. La principal diferencia es que los Rasmussen eran cinco, mientras que el vikingo solamente uno. Pero la estética y el tipo de canción son muy parecidos.