Jordan, de 21 años, acudía a First Dates para conocer a alguien que le hiciera creer en el amor. Algo que creyó que le podía ocurrir con Javier, de 20 años, al verle entrar al restaurante.
Desde el primer momento ambos se sonrieron, encontraron temas de conversación, intereses en común y se fueron relajando... hasta que llegó la política. A Jordan se le heló la sangre al escuchar que Javier vota a Vox.
“¿Cómo vas a votar a Vox? Me parece un partido súper radical”, comentó el soltero, mientras su cita respondía que había “peores partidos”. Al ser preguntado por cuál, Javier señaló al PSOE, lo que volvió a sorprender a su interlocutor: “Pedro Sánchez no te quita los derechos. No puedo entender que un gay vote a Vox, ni un inmigrante, ni una mujer...” comentó aturdido.
Mientras Javier intentaba argumentar su voto: “Creo que puede levantar España. No me he leído el programa de Vox, lo he visto por encima pero como partido español puede levantar la economía aún dejando de lado algunos derechos como gais, el aborto...yo que sé, no entiendo, me gusta la política pero hasta un punto. Yo no estoy en contra de los gais ni mucho menos” decía titubeando.
En los totales, Jordan no daba crédito: “La cita estaba yendo súper bien hasta que me ha dicho que vota a Vox. Lo que hemos progresado se va a ir a la mierda porque tú votes a ese partido, no, no”, repetía.
Sin embargo, esa charla sobre política no le quitó a ninguno la atracción que nació al verse y acabaron en el cuarto oscuro besándose. Aunque al encenderse la luz y preguntarles si querrían repetir, ambos volvieron a la realidad:
“El hecho de que votes a un partido que me priva de derechos me explota la cabeza y no podría estar con una persona así”, lamentó Jordan. Mientras Javier respondió en la misma línea: “No ha habido ese feeling que podríamos haber tenido”.