'Cuéntame' aún puede tener el digno final que merece y necesita (con permiso de Imanol Arias)
En 1996, cuando propusieron a Imanol Arias participar en una serie que se iba a llamar Cuéntame cómo pasó, los detalles de aquel proyecto le hicieron pensar que “se estaba armando algo muy fuerte”. “Teníamos la conciencia de que aquello iba a ser gordo, así que había que trabajarlo muy bien”, reveló el actor hace sólo unos meses. En efecto, la serie tuvo un enorme éxito desde que se estrenó en 2001, pero fue perdiendo audiencia poco a poco y el paso del tiempo hizo mella en muchos de sus actores. Veintiún años después, al protagonista de Cuéntame se le ha acabado la paciencia.
“Yo he dicho que o me ofrecen un final corto y bueno, o chao mercao”, afirmó tajante en una entrevista concedida la semana pasada a TeleBilbao. El final de la serie resuena por los pasillos de TVE desde hace tiempo aunque todavía no haya sido confirmado oficialmente por la cadena pública. Y los actores, que se han tenido que pronunciar sobre ello en multitud de ocasiones, siempre han dicho que la productora (Ganga Producciones) no les había transmitido nada al respecto. Imanol Arias ha roto esa postura discreta que se había extendido entre los miembros del reparto.
El intérprete de Antonio Alcántara se despachó a gusto contra RTVE y sus empleados, “que yo he visto que no hacen nada, que sobran”. Molesto por el hecho de que se haga público su salario pero no el de todos estos trabajadores, el actor aseguró que le resulta “insoportable estar en esa cadena” a la que espera “no volver en mucho tiempo” porque, entre otras cosas, ha cancelado Cuéntame por las supuestas quejas de una consejera socialista a la que, según dijo, no le han gustado las tramas de esta temporada en la que se alude permanentemente al Gobierno de Felipe González.
Después de hacer estas sorprendentes declaraciones que “abochornaron” a la productora de la serie, Imanol Arias ofreció unas disculpas con las que exhibió una personalidad bastante parecida a la del personaje que interpreta desde hace 21 años: “TVE es como mi familia y uno no puede perder los estribos con la familia”. La frase podría estar sacada del guion de Cuéntame, donde Antonio Alcántara no duda en mostrar los puños para defender a los suyos pero, a la vez, es un foco de problemas para todos ellos por esa incontinencia verbal que tanto le caracteriza.
Una serie resiliente pero que no debe seguir arriesgando
Dejando a un lado cualquier posible comparación, lo preocupante de todo este asunto es que su desahogo en la televisión vasca parece sincero y se une al malestar que ya exhibió la actriz María Galiana (Herminia) en Salvados, donde dijo que estaba “un poco harta” de la histórica ficción de TVE. Por su parte, Pablo Rivero (Toni) tampoco parece entusiasmado con el futuro de Cuéntame: “¿Hasta dónde te gustaría que llegara la serie?”, le preguntó hace unos días El Televisero, a lo que él respondió lo siguiente tras un silencio esclarecedor: “No lo sé... Ahora estoy tan desconectado, que no lo sé. Estoy con la cabeza en otro sitio, la verdad”.
El desánimo que se percibe –o se intuye– entre los miembros del equipo está siendo demoledor para la reputación de la serie más longeva de nuestra televisión. Cuéntame se ha sobrepuesto a muchas crisis, incluso al escándalo fiscal que afecta al dúo protagonista; ha disimulado la salida de algunos actores importantes –Ricardo Gómez y Elena Rivera se marcharon para realizar otros proyectos–, se mantiene por encima del millón de espectadores y ha creado tramas interesantes cuando los guiones parecían estar demasiado trillados. Pero, dejando a un lado los éxitos conseguidos hasta cuando el viento soplaba en contra, es sintomático que el final de Cuéntame sea un tema tan recurrente.
En la temporada 22 que concluye este jueves 16 de junio, las tramas de la serie avanzan por la década de 1990, aproximándose lentamente al nacimiento de esta serie que inició su larguísimo recorrido sólo unos días después del atentado del 11 de septiembre de 2001. Se ha especulado mucho con la posibilidad de que los Alcántara se despidan del público reunidos frente al televisor para ver una serie llamada Cuéntame cómo pasó.
No sería un final demasiado original, pero qué más da: sería un final perfecto. Porque los fans esperamos que Cuéntame pueda bajar el telón con toda la dignidad que se merece una serie que nos ha hecho empatizar con todos y cada uno de sus personajes, que nos ha hecho sentirnos parte de la familia Alcántara, que ha narrado la historia reciente de nuestro país y ha sido cantera de talento para la cultura española.
El ataque de Imanol Arias contra RTVE es la vuelta de tuerca que nadie esperábamos. Y aunque haya reconocido que mintió al hacer semejantes acusaciones, el daño ya está hecho. Pero una buena serie como Cuéntame aún puede hacernos olvidar estos episodios recientes que amenazan con amargar su recta final. Todo dependerá de cuánto más se pretenda estirar el chicle.