Las tres puertas despidió su segunda temporada con tres invitados: Goya Toledo que habló de lo complejo que es la vida del actor, Alfred García que reflexionó sobre el “parón” que hizo en su trabajo y Luis San Narciso, el director de casting más famoso de nuestro panorama audiovisual.
María Casado pidió a este último que definiera su profesión: “La persona que pone las caras a una historia”, respondió él. Y es que ha sido el “descubridor” de talentos como el de Carmen Machi, Javier Cámara, Paco León, Óscar Jaenada y Blanca Portillo, entre otros muchos. Por lo que carga con una vida llena de anécdotas y momentos curiosos en los castings.
Y sobre esas pruebas, señaló algunos puntos imprescindibles para él: “Aprenderse bien el texto y no tropezarse con los muebles, ser puntuales, rigurosos y apasionados”. Cuando todo eso se garantiza, aún falta algo más para ser el escogido: “Hay gente que no es cuestión de belleza ni nada, es una actitud, una voz, un carisma que te hace ir hacia allí y que incluso te hace elegirle hasta antes de la prueba”.
Así descubrió, por ejemplo, a Ana de Armas: “Me alegro de todo lo que está logrando porque era una chica muy trabajadora. La contraté para El Internado según entraba por el despacho porque era una fuerza de la naturaleza. La había visto en una película cubano y me pareció tan bella, tan importante, tan buena actriz que no le hice ni prueba”.
De forma distinta conoció a Carmen Machi y Javier Cámara: “Javier trabajaba como acomodador de un teatro en el que yo también colaboraba. Él estudiaba arte dramático, me invitó a su muestra de fin de curso y me quedé con la boca abierta. Mientras que a Carmen Machi también la había visto en teatro antes. Me parece una Meryl Streep española. Es de las mejores cosas que me he encontrado”, confesó.
En esa línea, opinó que “hay mejores actrices en España. El mundo de las actrices hay una cantidad de talento bestial”. Y lamentó que, tras haber trabajado con intérpretes como Amparo Baró, Juan Diego, Lola Herrera... los guionistas escriban muy pocas historias con gente mayor. Hay gente muy grande y muy talentosa. Es una pena“.
Así, San Narciso concluyó, una de las escasas entrevistas que concede, con el siguiente consejo a los jóvenes actores y actrices: “Que no se comparen con nadie porque las carreras siempre son individuales, y que trabajen mucho.”