Al frente de “El Objetivo” cada domingo en laSexta, y conduciendo los especiales informativos y electorales de la cadena, Ana Pastor se ha convertido en uno de los principales rostros de la cadena de Atresmedia.
Un canal que lleva ya muchos meses siendo la referencia informativa por encima incluso de TVE, con una apuesta decidida por la actualidad y la información que durante el conflicto catalán ha vivido su punto más álgido.
Sobre ese estatus que se ha ganado laSexta, y también de cómo valora el papel de cadenas públicas como TVE y TV3, hablamos con la periodista al presentar su nuevo proyecto de “¿Dónde estabas entonces?”, que permite ver a una Ana Pastor diferente.
Aprovechamos también para constatar que algunos políticos siguen evitándola, para saber un poco más de su nueva aventura profesional con su propia empresa, y para conocer su opinión sobre los casos de acoso sexual a mujeres que se han desvelado en todo el mundo.
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¿Por qué la Ana Pastor de “Dónde estabas entonces” parece distinta a la de “El Objetivo”?
Hay quien dice que en “Dónde estabas” parezco hasta simpática [ríe]. Lo cierto es que soy igual, pero la diferencia es que no tengo enfrente a un político. Tengo a un ciudadano que no sólo no tiene una responsabilidad pública, sino que ha hecho cosas muy buenas por este país. Es el programa en el que más he tenido que tragar saliva, y se me ve emocionada. Todos somos seres humanos, y se refleja en el programa.
¿A nivel personal, le permite desconectar un poco del clima político?
Para mí es un aprendizaje. Como dice Pablo Alborán en una de sus últimas canciones, es un parón en medio del caos. A mí me está enseñando muchas cosas, incluso a frenar, a pararme, a pensar muchas de las cosas que ocurren ahora y que seguro vienen de las cosas que no se han hecho o se han hecho mal.
"Esta democracia es imperfecta y hay que seguir diciéndolo"
¿Ese “saber pararse” es uno de los factores del éxito de laSexta a nivel informativo?
Creo que es una combinación de saber escuchar lo que a la gente le interesa, y es evidente en las audiencias con el tema de Catalunya. Yo recuerdo hace años cuando nadie hablaba de Catalunya y nosotros en laSexta sí nos decían que eso no funciona en audiencias, pero daba igual porque ese problema ya existía hace 4-5 años. Y cuando deje de dar audiencia, pero siga siendo un problema y una preocupación para la gente vamos a seguir así. Yo creo que la combinación de ambas cosas, del frenesí de la actualidad y de reflexionar, es uno de los éxitos de la cadena y de las apuestas que está haciendo por todo tipo de formatos.
¿“Dónde estabas” sirve también para enseñar a los más jóvenes lo que costó esta democracia?
A mí una de las cosas que me enseña el sentarme delante de todos los protagonistas es que hemos mejorado. Lo que no significa que no haya que añadir, que es lo que hace laSexta hoy en día, que hay agresiones homófobas a día de hoy, por ejemplo. No podemos decir que el problema se ha solucionado. Hemos mejorado mucho como país, hemos pasado de una dictadura a una democracia, pero la democracia es imperfecta y hay que seguir diciéndolo. Y si perdemos el espíritu crítico, que yo no pienso perder y que caracteriza a laSexta, nos estaremos equivocando.
¿Ese espíritu crítico puede ayudar a aclarar conceptos muy usados ahora mismo como el de “preso político”?
Sí. El otro día leí un tuit interesante que decía “nunca habían salido en las radios tantos presos políticos en los últimos 40 años”. Y eso también hay que decirlo, porque parece que ahora nos acordamos de los presos políticos para justificar que los de Catalunya no lo son. Lo son para algunos, y no lo son para otros. Lo que hay que contar es las versiones de lo que sucede. Uno de los ejercicios que ha hecho laSexta es tratar de entender en los últimos años qué estaba pasando en Catalunya. Y eso hace que Oriol Junqueras, ahora en la cárcel, se viniera al plató de El Objetivo a Madrid, el día anterior de la Diada, a responder a un grupo de ciudadanos en directo, y por supuesto sin saber qué le iban a preguntar.
Ese ejercicio no lo está haciendo el Gobierno. Y evidentemente el gobierno catalán, y así lo han reconocido, se ha saltado las leyes, y por eso están teniendo los problemas que están teniendo ahora. Pero yo creo que también han sabido dar la cara mucho más. Luego ya, cada uno puede deducir. Amnistía dice que no son presos políticos. Amnistía, que no creo que sean sospechosos de ser del PP.
"Los independentistas han sabido dar más la cara"
¿Vivió algún momento de tensión durante toda la cobertura desde Catalunya?
Sí, como los que se han visto en directo de todos los compañeros. No lo voy a centralizar en unos o en otros, porque había un montón de gente. Tengo que decir que es minoritario, no es la gran parte de los que estaban los que insultan o silban. Y claro que pueden silbar, es más nosotros contamos en directo que nos silban, lo que digo es que es muy difícil que sepas si estamos manipulando si no estás escuchando lo que decimos y si no permites que la gente en su casa lo escuche. También te digo que lo que “prensa española, manipuladora” luego cuando bajas de hacer los directos te dicen que no va por laSexta, lo que pasa es que cuando se enciende la cámara, lo tienen que decir.
¿Este conflicto ha beneficiado más a los informativos de las cadenas, o a los políticos que evitan hablar de otros temas?
A mí no me gusta mucho cuando hay un problema tan grave utilizar una expresión como “beneficiar”, aún entendiendo que se refiere a las audiencias. Creo que laSexta tiene que estar cuando la gente está sufriendo, cuando está cabreada, cuando le va bien, cuando le va mal. Ese es el ejercicio que hacemos. Y por eso la gente pone laSexta cuando algo ocurre, porque sabe que estamos.
¿Cómo valora el papel de dos cadenas públicas como TVE y TV3?
Tiendo a ser muy crítica con todo, y lo soy también con la televisión pública. Hay quien tiene autoridad moral para hacer crítica de otras televisiones públicas, estoy pensando en el Consejo de Informativos. Jenaro Castro ha sido noticia en la BBC. Y no creo yo que la BBC esté adoctrinada por nadie. Si Jenaro Castro ha sido noticia en la BBC, quizá es porque se lo ha ganado a pulso metiendo la música de El Exorcista debajo de unas imágenes de Puigdemont. Hay muchas maneras de contar las cosas, y se me ocurre qué intención tenía hacer eso.
Igualmente soy crítica cuando algo en TV3 no me gusta, como que se lleve una camiseta que manifiesta claramente una idea política. Dicho lo cual, como digo, hay quien tiene la autoridad moral para hacer esa crítica, el Consejo de Informativos y Xabi Fortes, y hay quien no la tiene como el partido político que se cargó la independencia de TVE y que se queja de la manipulación en TV3 y habla de intervenirla, cuando son los culpables de la manipulación en TVE.
¿Cree que los políticos catalanes en Bruselas cambiarán de actitud y darán entrevistas?
No sé si van a cambiar de actitud, pero yo cada día pido a Puigdemont y a algún otro que nos dé una entrevista. Yendo a Bruselas, dúplex, con las facilidades que les permita su actual agenda. Yo voy a seguir pidiéndola, no sé lo que harán.
"Si Jenaro Castro ha sido noticia en la BBC, quizá es porque se lo ha ganado a pulso"
¿Qué excusas os ponen?
Nos pasa un poco lo mismo que con Rajoy, que sigo pidiendo entrevistas y con nosotros no ha venido. Nos dicen que “lo están pensando”. Pedro Sánchez sigue pensándolo 3 años después, Susana Díaz sigue pensándolo, Mariano Rajoy sigue pensándoselo...
¿Y por qué se lo piensan tanto?
No lo sé, eso se lo tendríais que preguntar a ellos. Nuestro plató está abierto. El otro día alguien en Twitter me decía que sólo entrevisto a los independentistas. No, es que dan más la cara. Es que Santi Vila se vino a Madrid, es que Oriol Junqueras se sometió a las preguntas de los ciudadanos, Artur Mas, Puigdemont...
¿No puede ser que le tengan un poco de miedo?
No lo creo, porque tenerle miedo a una periodista queriendo dirigir un país, me parecería un poco extraño. No veo a Merkel con miedo a un periodista.
¿Por todo esto, te has planteado centrarte más en programas como “Dónde Estabas”?
Tengo la suerte y la intensidad para poder hacer ambas cosas. Pero no me he aburrido de los políticos. De hecho, no me aburro ni siquiera de que me mientan. Me parece que esa es nuestra labor. En los 20 años que llevo ya en la profesión, nunca me he arrepentido de ser periodista. Y el día que me arrepienta, o empiece a flaquear, o me aburra, me dedicaré a otra cosa.
¿Qué tal es Jordi Évole como canguro de tus hijos?
[Ríe]. Tanto en Salvados como en las redes sociales, donde hay alguna maravillosa, hicieron la broma, y la verdad es que ojalá el problema de la conciliación fuese sólo un problema de Ferreras y de Pastor. Le pasa a cualquiera. Yo el otro día ponía el ejemplo de un sector al que hay que cuidar como el de las enfermeras, a las que por un problema de mi madre he tenido cerca. He visto cómo van y vienen corriendo, no llegan al colegio, tienen contratos y sueldos lamentables...
¿Ferreras también va a querer tener otro programa suyo?
Ferreras ya hace muchas horas, incluso cuando no se le ve también está haciendo muchas horas. Él dirige editorialmente también la cadena, y los especiales que hace ya se han convertido en una cosa habitual, ya han dejado de ser especiales [ríe].
¿Por qué se ha lanzado a crear su propia productora?
Es una manera de crecer. Hay un mundo ahí fuera que no tiene que ver sólo con la televisión. Más que una productora, lo que voy a hacer es una startup. Es muy interesante cómo esa generación que tiene 15 años, cuando se quiere informar, no lo hacen a través de los canales habituales. Y me parece muy interesante ponerme en su cabeza y tratar de ver cómo podemos contribuir a que ellos se informen. Quiero estar en contacto con ese mundo, y de ahí la idea.
Tras el escándalo Weinstein, se han destapado muchos casos de acoso sexual. ¿Ha sufrido alguno?
No. Yo acoso sexual no he sufrido nunca, y si lo hubiera sufrido lo contaría. Lo que me parece indignante, lamentable y patético es que haya diarios nacionales que pongan en duda que porque una mujer no denuncie acoso sexual en el momento en el que le ocurre una violación, acoso, tocamientos... y tarde años, se ponga en duda a la víctima. Me parece impresentable. Lo único que quiero decir es que hay que apoyar a las víctimas, y hay que darles tiempo para que asimilen lo que les ha ocurrido. Si alguien necesita 20 años, pues 20 años. Sólo faltaría que pongamos en duda ese tipo de cosas.