'Estoy vivo' cerró su 3ª temporada con sonrisas, una decepción y una puerta abierta para la 4ª entrega
¡AVISO, SPOILERS!: esta noticia desvela lo ocurrido en el final de la 3ª temporada de 'Estoy vivo'
Estoy vivo afrontó anoche el final de su tercera temporada con varias cuentas pendientes. La más importante, que Márquez, Sebas y El Enlace devolvieran definitivamente a la vida a Laura, Susana y Bea. Un objetivo que han perseguido durante desde el principio de la temporada y que, en este décimotercer y último capítulo en TVE, finalmente vieron cumplido.
Así, Vero y Rebe acudieron a La Pasarela para permitir que Laura y Bea regresaran a la Tierra sanas y salvas. Más difícil fue el retorno de Susana, que tuvo que ser revivida, no sin apuros, en el piso de Márquez y El Enlace. Escenario que sirvió, además, para que el personaje de Anna Castillo diera luz a Adriana, el bebé que ha tenido con Iago y el primer ser que nace de la unión de una humana con un Enlace.
Esta condición hace de Adriana una niña especial. Hasta el punto de que la Directora decide nombrarla como su sucesora al frente de La Pasarela. Aun sabiendo pues los 'Enlaces' no ven con buenos ojos que una mitad humana-mitad Enlace lidere sus designios en el futuro. “Es un problema de poder”, explica el personaje de Julia Gutiérrez Caba, que de todas formas así sigue adelante con su plan porque, a su juicio, lo mejor para La Pasarela es que esté dirigida “por un ser que esté entre dos mundos, capaz de liderar el cambio y de integrar a todas las civilizaciones”.
Márquez derrota (otra vez) al Carnicero
Con Laura y Bea de vuelta y nuestros protagonistas centrados en recuperar a Susana y dar a luz a la pequeña Adriana -incluido un Santos que no deja de alucinar con tanta revelación paranormal-, es Carlota la encargada de plantar cara al ejército de Enlaces que ya en el capítulo anterior causaron estragos en la comisaría asesinando, entre otros, a David. Aunque como el policía, ella también acaba muriendo a manos del rival.
Así, el desenlace nos lleva a un nuevo duelo entre Márquez y El Carnicero en casa del primero. Y como ya ocurriera en los anteriores, el personaje interpretado por Javier Gutiérrez se sale con la suya gracias a un certero tiro en la cabeza.
Con el gran enemigo derrotado y el bebé de Susana y Iago a salvo, la tercera temporada de Estoy vivo culmina su final feliz resucitando a David y Carlota, y reservando una sorpresa más. Aunque no especialmente positiva. Y es que Iago -que a lo largo del capítulo renuncia por completo a su condición de Enlace, traje incluido- sorprende a Márquez con una cápsula con su verdadero cuerpo, el de Andrés Vargas. Sin embargo, algo falla en el momento de recuperar su verdadera forma y Márquez sigue siendo Márquez, por lo que todo apunta a que nunca podrá volver a su cuerpo original. Una decepción que, sin embargo, queda en un segundo plano cuando éste se ve de nuevo con su familia reunido.
Una puerta abierta para la cuarta temporada
Finalmente, la serie creada por Daniel Écija deja abierta la puerta a una cuarta temporada, pues la Directora enseña un documento a Vero que da a entender que van a tener un duro trabajo por delante. “Tenemos que recuperar fuerzas para lo que nos espera”, asegura la primera mientras disfruta de una paradisíaca estancia en la playa.