Fallece Carl Reiner, leyenda de la comedia estadounidense para cine y TV, a los 98 años
El actor, guionista y director Carl Reiner, uno de los grandes nombres de la historia de la comedia norteamericana, ha fallecido en la noche del lunes 29 de junio a los 98 años en su domicilio de Beverly Hills y de causas naturales, tal y como informa Variety.
Ganador de nueve Premios Emmy, deja tras de sí un legado inabarcable, donde destacan títulos para televisión como El show de Dick Van Dyke, del que fue creador, y sus numerosas colaboraciones con Steve Martin en films como Dos veces yo o Cliente muerto no paga.
Pese a su avanzada edad, no cesó de trabajar hasta sus últimos momentos, como prueba un currículo reciente donde destacan sus intervenciones como actor de doblaje en Toy Story 4 y su spin-off para Disney+ Forky hace una pregunta, en Padre de familia o Jake y los piratas de Nunca Jamás. La última vez que se colocó delante de una cámara fue en un episodio de Angie Tribeca emitido a finales de 2018.
En 2017, sería protagonista de un documental para HBO, If You’re Not in the Obit, Eat Breakfast, centrado en las grandes estrellas nonagenarias de Hollywood. Además de él, aparecían otros amigos suyos como Mel Brooks (que cumplió 94 años el domingo 28), Norman Lear o el recientemente fallecido Kirk Douglas. Asimismo, mantenía un perfil muy activo en redes sociales, que en los últimos años utilizó para mofarse de Donald Trump. Sin ir más lejos, su último mensaje en Twitter era del mismo día 29, donde lanzaba una pulla al presidente de los Estados Unidos.
Trayectoria de Carl Reiner
Nacido en el Bronx, comenzó a estudiar interpretación antes de entrar en el ejército durante la Segunda Guerra Mundial. Ya entonces su talento le permitió enrolarse en la Unidad de Entretenimiento, dedicándose a entretener a las tropas hasta que fue licenciado. A su vuelta a Estados Unidos comenzó a acumular créditos de reparto en teatro y televisión.
La carrera de Reiner despegó en la década de los cincuenta, como miembros de Your Show of Shows de Sid Caesar, por el que ya obtuvo sus dos primeros Emmy como mejor actor de reparto en 1956 y 1957. En este trabajos conocería a Brooks, a quien le uniría una larga carrera y una estrecha amistad, que se reflejaría en sus sketches 2,000 Year Old Man, un proyecto de comedia sonora del que lanzarían varias ediciones entre 1960 y 1997, consiguiendo con la última de ellas un Grammy.
Ya en los años sesenta, alcanzaría su gran éxito profesional como creador, director, guionista y ocasional actor de El show de Dick Van Dyke, que se mantendría durante cinco años en CBS. Con esta comedia, basada en sus experiencias en Your Show of Shows, obtendría cinco Emmys (tres como guionista y dos como productor). En paralelo, a partir de los sesenta comenzaría a dirigir no solo televisión, sino también cine, debutando en estas lides en 1967 con Enter Laughing, adaptación de su autobiografía homónima, y en teatro, siendo un montaje de Something Different el primero de los que dirigió.
Su carrera como director continuaría a velocidad de crucero, siempre centrado en la comedia: ¿Dónde está papá?, Soy único, Un genio con dos cerebros, Dos veces yo, Bert Rigby, estás loco o Hay un muerto en mi cama serían algunos de los títulos que pergeñó entre los setenta y ochenta. Aunque de entre todos ellos conviene destacar Cliente muerto no paga, una parodia del cine negro de los años cuarenta y cincuenta protagonizada por Steve Martin, cuya historia se construye utilizando metraje de archivo de las grandes estrellas del Hollywood clásico. Su último filme como director sería Ese loco sentimiento, protagonizado por Bette Midler y Dennis Farina.
Presencia habitual en multitud de series de nuestros días
Desde entonces, y a pesar de su edad, siguió participando con asiduidad en proyectos ajenos: tendría participaciones destacadas en series de televisión como Frasier, Loco por ti, Ally McBeal, House o Dos hombres y medio; mientras que en la gran pantalla será recordado por su papel en la trilogía iniciada con Ocean's Eleven de Steven Soderbergh. Entre otros reconocimientos, recibiría el Premio de Honor del Sindicato de Guionistas de América en 1995, el Premio Mark Twain a la Comedia en 2000.
En lo personal, Reiner permaneció casado durante 65 años con Estelle Reiner, que falleciera en 2008. Tendría tres hijos: el más conocido, Rob Reiner, seguiría sus pasos con éxito y dirigiría títulos del calibre de This is Spinal Tap, Cuando Harry encontró a Sally, La princesa prometida o Misery. sus otros dos hijos son el pintor Lucas Reiner y la dramaturga Sylivia Ann Reiner.
