Este lunes, Lara Álvarez volvía a formar parte del equipo de Gran Hermano conduciendo sus Última hora, tras la cancelación de Cuentos chinos por parte de Telecinco. “Qué feliz estoy de volver a casa. Qué gusto Súper, cuánto te he echado de menos”, expresaba al arrancar la entrega.
Su primera misión fue aclarar la polémica sobre la salida de Oriana Marzoli de la casa. Mientras el reality ha asegurado desde el principio que ella había abandonado de forma voluntaria, la influencer desmentía tal decisión en sus redes: primero cargando contra el programa por editar los vídeos y después asegurando que ella entró de nuevo a ensayar la prueba.
Por ello, Álvarez se puso seria y dio paso a las “imágenes inéditas, sin cortes” de la joven en el confesionario, cuando decidió marcharse y discutía con el Súper de la siguiente manera:
“Os quedáis con la persona esta que me insulta [Álex Caniggia] y se lo permitís. Me voy a tomar por culo. No voy a seguir soportándolo. Estoy hasta los cojones, en realidad. Injusticias por todas partes, conmigo sois los más injustos y encima tengo que soportar que me insulten. Os juro por Dios que me tiro todo el puto día diciendo que en GH permiten los insultos...” y acababa pidiendo que le abrieran la puerta para abandonar.
Seguidamente, Lara dejaba claro cuál era el protocolo de abandono que Oriana había explicado a su manera: “Es un proceso largo que comienza cuando un concursante responde 'sí' a la pregunta '¿te quieres ir del concurso?'. El viernes Oriana activó el protocolo, como habéis visto, y todo se pone en marcha. Y tal y como le pide al Súper sale del confesionario a una sala habilitada para este tipo de situaciones. Es aquí cuando Oriana traslada a la organización que cambiaría de idea si se cumplen una serie de exigencias. Se la escucha y mientras se trasladan sus peticiones a la cadena de mando dejamos que regrese a la casa donde sus compañeros se encuentran ensayando la prueba semanal”, detalló refiriéndose a lo que había desvelado la ex concursante en sus redes.
“Tras realizar la consulta de las exigencias de Oriana”, entre las que Ion Aramendi el domingo señaló la de que entrara su novio Daniele, “se deniegan por ser incompatibles con GH y una vez que ella entiende que esas exigencias no han sido satisfechas mantiene su decisión de irse, ahora sí, sin vuelta atrás. En ese momento, Oriana vuelve a entrar a la casa para hacer sus maletas, ya que considera que nadie puede tocar sus pertenencias, pero sin contacto con ninguno de sus compañeros”.
Lara acabó la explicación de la siguiente forma: “Esta es la secuencia de los hechos, la fotografía completa de su abandono. También queremos destacar que el programa dispone de un equipo médico continuada, los concursantes son atendidos por un equipo médico independiente que realiza un diagnóstico y de ser necesario prescriben el tratamiento o medicación que consideran adecuado”, aseguró refiriéndose a la pastilla de la que también habló Oriana.
“Dicho esto, la vida en directo continúa”, zanjó la presentadora para continuar con el resumen de las últimas horas del resto de concursantes.