El Jefe Infiltrado de laSexa se metió este jueves en el negocio de Telefurgo, una empresa de alquiler de furgonetas en la que el trabajo no funciona tan rodado como pensaba su CEO, pero en la que el ambiente familiar pesa más que cualquier fallo.
Francisco Lucas, fundador de la compañía, se infiltró entre sus propios trabajadores como José Manuel, un transportista con mucho que aprender. Su misión no era otra que detectar actitudes cuestionables entre el equipo para seguir creciendo como empresa, pero lo que se encontró le sorprendió más de lo que esperaba.
El jefe descubrió que en sus furgonetas se transporta algo más que mercancía y que una de las empleadas se toma un exceso de confianza con los clientes. Pero lo que más pareció molestarle fue el comportamiento de Julio, que cometió varios errores durante la jornada que provocaron un retraso en las entregas y la cancelación de uno de los trabajos.
En su reunión final, Francisco Lucas reprochó al trabajador que su moto se quedase sin gasolina y que se le olvidase llevar al reparto un casco para su acompañante. “Estamos perdiendo tiempo y dinero. Los fallos que has cometido son muy graves, ¿te das cuenta de que esto es un motivo sobrado para un despido procedente?”, le dijo al empleado, provocando su llanto desesperado ante el temor de quedarse sin trabajo.
De un despido procedente a un ascenso con premio
Sin embargo, todo dio un giro y la decisión del jefe sorprendió a la audiencia y al propio Julio: “Hemos decidido dar por terminado tu contrato actual de Telefurgo porque vamos a hacerte un nuevo contrato. Habrá un ascenso en el que tendrás otras funciones y una nueva responsabilidad”, anunció el empleador, al que su infiltración en el equipo le sirvió para ver que su trabajador tiene verdadera pasión por lo que hace.
“He comprobado que ante la adversidad resuelves muy bien, que no pierdes la sonrisa con los clientes y que ante cada incidencia terminas buscando una solución. Me ha llegado al alma que me dijeras que Telefurgo es tu segunda casa”, añadió el CEO.
Pero el 'premio' no quedó ahí, también le proporcionó 3.000 euros extra a su nómina para ayudarle a solventar sus problemas familiares. “Pensaba que me iban a despedir”, dijo el trabajador, aliviado y emocionado por el gesto de su jefe.
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