“Uno de los finalistas se irá esta noche a casa” anunció Jorge Javier Vázquez al arrancar la entrega 14 de Gran Hermano: Límite 48 horas. El perjudicado fue Jorge, el menos votado para ganar.
Salida que dejó a Violeta, Juan, Edi, Nerea, Óscar y Ruvens más cerca del maletín. Eso sí, antes afrontaron los clásicos juicios en los que la audiencia decidió si habían sido inocentes o culpables de lo que se les acusaba.
Además, en plató contaron por primera vez con Adrián - concursante que había sido expulsado disciplinariamente- y que pidió disculpas “por las imágenes que se vieron el otro día”. Añadió que respetaba “la decisión y la comprendo. También tengo que...”, momento en el que el presentador le interrumpió y pasó a otro tema.
Jorge es el expulsado, que se queda a las puertas de la final
Jorge Javier informó a los finalistas que uno de ellos “se queda a las puertas de la gran final” esa misma noche. Seguidamente, les mostró los porcentajes ciegos, que votaban en positivo para ganar: 32%, 26%, 17%, 12%, 5%, 5% y 3%. El último puesto era el que iba a ser el expulsado.
Casi al final de la gala, Jorge Javier fue informando, a cuentagotas, de la decisión del público. “La audiencia ha decidido que sigan siendo finalistas Óscar, Ruvens y Violeta”, lo que celebraron con aplausos y suspiros de tranquilidad.
Entre Nerea, Edi, Jorge y Juan estaba el expulsado. Ya pasadas las 2 de la madrugada, el presentador sentenció: “La audiencia ha decidido que no continúe Jorge”.
Violeta, Edi, Juan y Nerea, “culpables” en la noche de juicios
El primero de los juicios lo protagonizó Violeta “por su soberbia, por basar su concurso en besarse con Edi, por tener una fuerte personalidad pero ser muy buena” contra Miguel Frigenti y Laura. Tras la charla, un 63% de la audiencia votó que era culpable.
El siguiente en someterse al juicio del público fue Óscar al que se le acusó de “alcahueta”, de mentir sobre los sentimientos de Ruvens, y de ser “falso” con Maica y Vanessa como testigos contrarias, y su hermano a su favor. La audiencia votó un 50% inocente y un 50% culpable, por lo que el juez le absolvió.
Edi fue el tercero en sentarse frente al juez. Le acusaron de tener una doble personalidad, intentando tener una carpeta con varias de la casa y basar su concurso en hundir a sus rivales. Maica y Javier mostraron pruebas de su doble juego con Violeta, y él pudo ver esos vídeos por primera vez. Finalmente, la audiencia le declaró culpable con un 52%.
Le tocó el turno a Nerea de ser acusada de “celosa y montar números”, de lo que ella misma se declaró culpable. Los testigos fueron su suegra, que acabó enzarzada con la madre de la concursante, y Luis. El 83% de la audiencia le declaró culpable de “montapollos, celosa y gritona”.
El quinto en sentarse fue Ruvens, acusado de ser estratega y utilizar a Óscar para conseguir sus fines. Lucía y Daniela ejercieron de testigos en contra y Laura a favor. Pero la audiencia le declaró inocente.
Le siguió Juan, al que acusaron de “mueble, cangrejo y bailar sin permiso”, de lo que se declaró inocente. Para testificar en su contra estuvieron Óscar y Marta Peñate. Acabó siendo declarado culpable.
Para acabar, a Jorge le acusaron de “falso y de presumir haber tenido una conexión especial con Violeta en el casting”. Contra él declararon Maica y Vanessa, pero Violeta le apoyó. Un 58% de la audiencia votó que era inocente.