Han tenido que pasar 14 años para que Pablo Motos y Jorge Salvador hablaran detenidamente en El Hormiguero sobre el origen de Trancas y Barrancas. Presentador y director desvelaron anoche los entresijos tras la creación de las dos emblemáticas hormigas, sin las cuales no se entendería el programa tal y como lo conocemos.
La historia se remonta a 2005, cuando Motos y Salvador recibieron el encargo de hacer un programa de televisión para Cuatro. Ambos, junto al antiguo realizador del formato, Álex Miñana, se citaron en la recepción del hotel para discutir los detalles tras este nuevo espacio. Lo de discutir fue literal, pues según Salvador, él y Motos empezaron a elevar el tono cuando el presentador expuso emocionado su gran idea: “Vamos a sacar dos muñecos de trapo que hablarán”.
“Yo me quedé en shock (...) dejé de oírte”, aseguró este el productor, cuyo impacto inicial tornó en enfado cuando su socio, convencido al máximo de su idea, sacó un calcetín negro con ojos y defendió que así debían ser los muñecos que debían aparecer en pantalla. “Me parecía muy graciosa la idea de que salieran dos pies con ojos y que hablaran”, expuso Motos, que finalmente acabó claudicando ante Salvador, partidario de hacer dos hormigas que dieran mayor sentido al nombre del programa.
Así las cosas, ambos llamaron a un diseñador, Óscar Julve, para que diseñara dos hormigas para el programa. Década y media más tarde, Salvador enseñó anoche algunos de esos primeros diseños de Trancas y Barrancas. Aunque el tono morado se mantiene en todos ellos, entre unos diseños y otros se aprecian notables diferencias. En uno tenían cuatro brazos, en otro colmillos, en otro una forma parecida a la de un cacahuete... Así hasta que finalmente encontraron el diseño que todos conocemos.
El nombre definitivo fue idea de Marron
Una vez elegido, Motos insistió en que los ojos tuvieran algún tipo de movimiento. Además, explicó que las esferas transparentes que les dan forma son, en realidad, la mitad de un “huevo de gasolinera”. Es decir, esas clásicas bolas con un juguete dentro que puedes conseguir también en los recreativos y otros establecimientos infantiles.
Por otro lado, Marron fue el que puso nombre a las hormigas. “Me pegan Trancas y Barrancas”, dijo para así descartar la extensa lista de opciones que manejaban. Entre otras, 'Troche y Moche' y 'Pipa y Popa'.
Finalmente, Salvador rescató la primera aparición de Trancas y Barrancas allá por 2006. En ella, Barrancas explicó que le llaman así “porque, cuando era pequeño, me caí por un barranco”. “Pues casi que a ti no te voy a preguntar por qué te llaman Trancas”, bromeó Motos con la otra hormiga. Ambas, interpretadas por Damián Mollá y Juan Ibáñez, también tenían un tono de voz diferente que ha ido cambiando desde aquella lejana primera emisión.