'La última tentación' mostró la noche “sin cojines” entre Isaac y Bela y la lección de dignidad de Lucía
La última tentación obtuvo su placer culpable más deseado: la infidelidad de Isaac, con la reacción de Lucía ante Marina. Ese era el “visionado de emergencia” que tanto se había promocionado y que por fin llegaba en esta quinta entrega del reality.
“Lo que un día Isaac separó, ha hecho que se vuelva a unir” concluía Fani en una acertada observación refiriéndose a Lucía, Manuel, Marina y Jesús que ahora se acercan más que nunca.
Todo ello, ocurrió en una noche en la que hubo hoguera e intercambio de villas con reencuentros tan agradables como indeseados para algunos.
La explicación de Lobo a lo ocurrido con Bela
En la última entrega dejaron en el aire el final de la noche a solas entre Bela y Lobo y en esta mostraron cómo ambos se besaban y acababan la noche juntos: “Fuera cojines” decía él que se metía en la cama junto a su mayor “tentación”.
Isaac confesaba a Bela lo siguiente: “Me gustas, ya lo sabes que sí. No me lo esperaba. Cuando hablábamos notaba el cariño que te tenía. Contigo me pasa algo muy raro, estoy muy a gusto y me siento muy bien. Llevo todo el día rayado pensando en la vida que tenía, estaba feliz con Lucía pero no compartimos la misma filosofía de vida”.
Mientras Bela respondía: “Espero que no te arrepientas. Estoy encantada pero no me gusta hacer daño a nadie pero Lucía no es mi amiga”.
Al día siguiente, Sandra Barneda preguntó a Isaac por lo ocurrido y él lo argumentó de la siguiente manera: “Quiero mucho a Lucía, he hecho mil cosas para estar juntos pero no es mi estilo de vida. No estoy enamorado de ella. Lo quería intentar de todas las maneras, me encuentro muy bien con ella, pero cuando nos despegamos tengo la necesidad de hacer otras cosas. Se merece a alguien que comparta su estilo de vida. No me arrepiento del beso porque me nació”.
Nueva hoguera con más decepción para Christofer y desgarro de Roberto
En la nueva hoguera los que peor lo pasaron fueron Christofer, de nuevo y aún más Roberto. El chileno escuchó cómo Isaac aseguraba que podría haber estado con Fani muchas veces. “Me da lástima estar con alguien así, la he querido tanto... pero al final tengo más papeletas de creer a Isaac que a Fani”, decía él.
Por otro lado, Roberto entró a la hoguera llorando por Andrea: “La quiero un montón y me duele mucho perderla aquí. Me da miedo”. Y como temía, acabó viéndola besar a Manuel y acostándose con él: “Una persona que te quiere no te hace eso. La que me pierde es ella a mí, no yo a ella. No estaba preparado para ver esto. Sigo sintiendo lo mismo por ella porque los sentimientos no se van en un día”, añadió.
Mayka escuchó a Alejandro decir cosas desagradables sobre ella como que no lo valora, que no sabe lo que es el respeto y que no le deja ser él mismo. Palabras que le sorprendieron: “Estoy flipando, nunca le he faltado al respeto. De esto tenía miedo, de que le metieran cosas en la cabeza. Por eso no avanzo con él. No entiendo por qué Alejandro no da la cara por mí”.
Jesús vio a Marina llorar por Lobo y lamentó que aún sintiera algo por él. Mientras que Lester confió en Patry en todo momento.
Cuando la presentadora les propuso que dos de ellos fueran a Villa Playa a resolver asuntos pendientes, decidieron ir Mayka y Jesús.
La “entereza” de Lucía al ver la infidelidad de Isaac
Sandra Barneda llegó a la villa acompañada por la locura de la alarma: “Por primera vez en la historia estáis a punto de asistir a un visionado de emergencia. Ha ocurrido un hecho de gran relevancia que puede marcar de manera definitiva a una de vuestras parejas”.
Solo pidió que le acompañaran Fani, Andrea, Lucía, Marina, Patry y Alejandro y les hizo entrega del iPad. Las imágenes que vieron fueron las de las últimas horas compartidas entre Isaac y Bela. Lucía empezó tranquila pero muy atenta a cada detalle. Los compañeros no dejaban de mirar su reacción y comentar lo “bien que se lo pasaban juntos”.
Hasta que llegó el momento del beso. Lejos de asombrarse como el resto, Lucía se quedó serena: “Yo he aprendido a no perder la salud por un hombre. Me duele, pero me importa una mierda”, dijo. Marina se echaba a llorar y Lucía continuaba: “Se ha retratado él y ella porque venía a maldad. Me siento mal, decepcionada pero el dolor que sentí por Manuel no lo siento ahora. Ya no quiero saber nada más de esa persona, no tengo nada más que hablar con él. Ni para despedirme. Son personas calientes que no respetan a nadie”.
“Marina llevaba razón y él es un actor”, concluyó Lucía. Marina añadió :“Yo había vivido exactamente lo mismo, lo había defendido a capa y espada y sabía cómo era”.
La unión de Manuel, Marina y Lucía
Y esta situación dio un giro de guion a todas las relaciones que se vivieron el pasado año. Mientras Marina y Lucía se habían distanciado por la traición de Isaac, ahora lloraban juntas. Y esta última pedía ver a Manuel: “Es el que más me conoce, es como si fuera de mi familia”.
Cuando él llegó, Lucía se derrumbó: “Tenías razón, he visto a Isaac besarse con Bela”. Él la abrazó y lloraron juntos, mientras Manuel decía: “Me duele porque tú no te mereces eso. Era una garrapata tuya. Me da pena por ti, qué mala suerte tienes chiquilla”.
Eso sí, Lucía aseguraba no arrepentirse de la experiencia: “No me arrepiento de haber venido, aunque haga el ridículo de mi vida. Me siento más fuerte”.
Las primeras palabras de Marina, a Isaac en su reencuentro
Antes de finalizar la entrega, Barneda anunció un nuevo intercambio en ambas villas: “Tenéis que abandonar de inmediato Villa Playa” dijo y señaló a Alejandro y Marina como escogidos para marcharse. A la vez que Mayka y Jesús entraban por la puerta.
Segundos después, Alejandro y Marina llegaban a Villa Luna y ella besaba a todos excepto a Isaac. El mismo día que había visto sus imágenes con Bela y el sufrimiento de Lucía. “¿Por qué no has besado a Isaac?”, preguntaba Barneda y Marina respondía: “Solo quiero decirle una cosa...” y ahí quedaba la entrega.
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