La cuarta gala de La isla de las tentaciones 5 mostró otro de los ases que tenía guardados en la manga: el de introducir una pareja nueva, a cambio de expulsar a otra antigua. Un giro que ocurre por primera vez en el formato y que obliga a las chicas a escoger cuál de ellas abandona la aventura.
Además, Laura fue la primera de la edición en pedir una hoguera de confrontación, sin siquiera haber visto las imágenes de Mario. Y sin saber que él había perdido el interés por Valeria y ahora lo tiene por Carmen.
Todos tuvieron sus segundas citas, nuevas noches de fiesta y Claudia se acercó más a Álvaro y tuvo sus primeras imágenes de Javi, que le enfurecieron: “¡Esto es una mierda!”.
Segundas citas con conversaciones muy intensas
Para la elección de sus segundas citas, Natalia no sorprendió a nadie escogiendo a Hugo “porque tenemos una conexión especial”; Claudia hizo lo propio con Álvaro para “ver qué tal”, mientras Álvaro se asombró y aseguró que era la chica que más le atraía; Laura escogió a Adrián “para seguir conociéndolo”; Paola quiso saber si podía sentir algo con Vladi “más allá de su físico”; y Sara optó por Álvaro porque le hace reír.
En la cita, Claudia confesó a Álvaro que les escogió porque no había sentido nada por el resto de chicos. Laura tranquilizó a su tentador explicándole que no quería nada con Álvaro y que solo quería seguir conociéndole a él. Hugo y Natalia se sentaron en un kayak para divagar sobre lo “despacio” que quieren ir en su (no) relación.
Mario y Valeria tuvieron una confesión muy lógica en la que él le explicó que se arrepentía del beso, ella le dijo que le daría su espacio y acabaron besándose igualmente. Samuel y Elena se dijeron mutuamente que eran los más guapos de la villa y el resto de conversación siguió con ese nivel intelectual.
Nuevas infidelidades y más faena
Tras la primera infidelidad de Laura con Adrián en esta nueva entrega le acompañó Mario con Valeria, en una de las noches de fiesta en la villa de los chicos, todos iban disfrazados de gato y la pareja se tumbó en una cama balinesa para darse su primer beso. Lo que abrió la veda y ya se besaron delante de todos en la piscina.
Hugo y Tania (o su “Cotufita”) también avanzaron en su complicidad, tras un masaje que le dio él en una hamaca y que empezó en la espalda y acabó en el trasero, porque lo tenía “muy cargado”.
Mientras que Mario le pidió a Valeria que no se creyera que era suyo, ni que ella era la única de la Villa, porque quería acercarse a Carmen: “Una chica a la que quiero conocer más”.
Segunda hoguera de las chicas que marca “un antes y un después”
“Os adelanto que esta hoguera va a marcar un antes y un después en vuestras vidas” advertía Sandra Barneda a las chicas que se sentaron frente a ella. Tania fue la primera en ver imágenes de un Samu baiando, muy cómplice con Elena y lamentando que su novia no le dé seguridad, gestos que molestaron a la joven pero no le dolieron.
La siguiente fue Claudia, que la anterior hoguera no había visto nada de Javi, pero en esta ocasión sí le vio hablando con sus compañeros de ella, llorando por ella, “roto” por ella, besando su foto en los calzoncillos... “¡Esto es una mierda!” enfureció la viceversa, “no hemos venido para estar en la cama, está como un mueble y eso no es ponerse a prueba. Espero que espabile, no puedo estar con una persona que sin mí no hace nada”.
Sara se sorprendió al escuchar a Manu confesar a una tentadora que había sido infiel en su anterior relación: “Me duele, me hubiera gustado que me lo contara. Vuelven mis miedos del pasado, otra vez. ¿Y si me hace lo mismo? Me quiero ir”, lamentó entre lágrimas.
Le siguió Paola que se molestó por ver siempre a Andreu al lado de la misma tentadora, cantarle y en el sofá hablando. Pero lo peor fue ver cómo él subía a la habitación y ella le seguía después, sin saber cómo acababa eso. “Parece que se ha olvidado de mí”, decía llorando.
Pero antes de finalizar, Barneda iba a poner imágenes de Mario a Laura y ella las rechazó: “No necesito ver un vídeo, quiero verle a él para preguntarle si me quiere y conozco las consecuencias”, aseguró. “Creo que Mario no va a entender nada, va a sentir que le he fallado y le pido explicaciones pero es lo que necesito”. Por lo que la presentador aceptó proponer la primera hoguera de confrontación.
Y antes de dejarlas marchar, Barneda les anunció la llegada de alguien: “Os presento a Cristian, en cualquier momento todo puede cambiar, así que adelante” y dio paso a otra chica llamada Ana. “Son pareja y desde este mismo instante forman parte de esta aventura. Pero para que ellos entren, una de vosotras debe salir y solo está en vuestras manos”.