Irene Villa vio junto a Samanta las imágenes del atentado de ETA que sufrió: “Pienso que soy un milagro”
Con el próximo estreno de La noche de Patria todavía por fijar fecha en Telecinco, Cuatro emitió este martes una nueva entrega de Samanta y la vida de con el testimonio de Irene Villa, víctima de ETA que a lo largo de estos años ha contado su historia en televisión.
En este caso, la invitada de Samanta Villar se lanzó a viajar por su infancia y niñez hasta el 17 de octubre de 1991, momento en que su vida se rompió por la mitad al sufrir un atentado de la banda terrorista cuando tenía solo 12 años.
Ese día, Irene Villa perdió las piernas y parte de una mano tras estallar el artefacto que ETA había colocado en el coche de su madre, una funcionaria de la Comisaría de Los Carmenes. “Parecía que estaba muerta y decían: 'A por la madre que la niña está muerta'. Se llevaron a mi madre, pero alguien por fin me dio la vuelta y comprobó que tenía pulso. Entonces dijeron 'Que la niña también está viva'”, contó la entrevistada a Samanta mientras ambas veían las imágenes de ese duro momento.
Villa contó que revisitar ese día a través de vídeos y fotografías no le impresiona. “Me acuerdo del día que nos sentamos a ver las imágenes mi madre y yo. Alucinamos. Pero no me impresiona, al revés. Pienso que somos un milagro y lo celebramos todos los días”, explicó a la periodista.
“Piensas que la vida es un milagro, porque dices 'ese trozo de carne y huesos es imposible que haya aprendido a caminar, que haya sido madre y que haya hecho todo lo que ha hecho'”, reflexionó sobre su propia vida. Pero el camino hasta hoy no ha sido fácil: “La vida ha sido una lucha diaria. Soy una persona que me gusta mucho la actividad, pero a la vez era una niña de 12 años. Había días que me ponía a llorar, y era una lucha conmigo misma... hasta que pasa el tiempo y te acostumbras. A veces se me ha pasado tirar la toalla de caminar, pero nunca he pensado que no quería vivir”, contó.
Irene Villa se reencuentra con el fotógrafo que tomó las imágenes del atentado
En la entrega de este martes, Samanta Villar también hizo una parada en el archivo de Manuel Montaño, el primer fotoperiodista que fotografió el atentado de Irene Villa y su madre. El fotógrafo mostró las siete imágenes que tomó ese día, con dos meses de experiencia profesional a sus espaldas, y contó cómo vivió ese día: “Al llegar nos frenamos”, explicó.
“Al darme la vuelta vi a Irene y me quebré. Era una niña, la veías con la falda escolar y las piernas partidas como cañas”, dijo emocionado, recordando también una visita al hospital que le marcó. “Se supera, pero eso siempre está”, aportó.
Montaño mostró a Samanta las fotografías inéditas del atentado a color, que no han visto la luz hasta ahora: “Impresiona”, acertó a decir la periodista.
Posteriormente, fotógrafo y presentadora acudieron al lugar de los hechos veintinueve años después para reencontrarse allí con Irene Villa y reconstruir la escena. “Igual que te hacen la foto el día que naces en un quirófano, él me la hizo el día que volví a nacer en una carretera”, apuntó Villa.
