Y ahora Sonsoles estrenó este martes su nuevo horario (de 18:00 a 20:00h) con el fichaje de Inés Hernand y la visita a plató de Isabel Gemio. La presentadora, una histórica de Antena 3 por sus años en el mítico Sorpresa, sorpresa, volvió por un día a su 'casa' para charlar con Sonsoles Ónega y, de paso, verse envuelta en dos anécdotas. Una protagonizada por ella misma y otra como testigo de excepción.
La primera se produjo cuando, en un momento dado de la entrevista, Isabel Gemio se vio a sí misma en uno de los monitores y quedó horrorizada con el plano que le estaban dando desde realización. “Uy, ese plano. Ese plano, ese plano, ese plano, ese plano. Es que me veo fea... y gorda. Me veo fea y gorda”, aseguró la periodista, que aprovechó la situación para contar una cosa que le había pasado recientemente.
Porque según la comunicadora, hace unos días alguien le puso por redes sociales: “¡Pero si estás muy vieja! ¿Adonde vas?”. Un comentario que ella se tomó con buen humor: “Me hace gracia, porque en el fondo algo de razón tienen”. Sonsoles Ónega negó la mayor - “¡pues no tienen ninguna razón! Lo está viendo todo el mundo”-, pero su invitada le quitó importancia al susodicho mensaje: “Sí quiero decir a las mujeres de mi edad que no se arredren por nada, ni por comentarios de ese tipo en las redes. A mí me hizo gracia el señor, pero en el fondo me da un poco de lástima”.
Lástima porque, según Isabel Gemio, “el problema realmente lo tiene el señor” si ve vieja a una mujer de su edad (62 años). “Además, yo no me veo vieja. No me ve mayor”, aclaró la periodista, que lanzó una última reflexión al respecto: “En cada momento de la vida tenemos una edad y hay que aceptar la edad”.
Ónega y su alusión a Telecinco
La segunda anécdota de la tarde se produjo cuando Isabel Gemio y Sonsoles Ónega hablaron, como presentadoras de televisión, de la importancia que tiene el equipo humano de un programa. Fue entonces cuando Ónega dijo que “como el equipo que hay en esta casa, en plató, no lo he visto nunca”. Sin embargo, rápidamente cayó en la cuenta de que sus palabras se podían interpretar como un desaire hacia el equipo que tenía en Telecinco. De ahí que dijera: “Oye, que en Telecinco había gente a la que yo quería mucho, pero es verdad que aquí... Tengamos la fiesta en paz. Miguelón y otros tantos”.
Mientras, Isabel Gemio optó por decir “Pasapalabra” y lavarse las manos mientras Ónega veía que iba camino de meterse “en un jardín”, así que optó por zanjar este asunto y cambiar de tema.