Ya se conocen los cuatro concursantes que lucharán por convertirse en el ganador de MasterChef Junior 6. Josetxo, Paula, Candela y Pachu serán quienes compitan tras superar a sus compañeros en las pruebas de la semifinal, emitida la pasada Noche de Reyes en TVE.
Evelyn, Jaime y Ferrán tendrán que conformarse con ver el último programa desde casa, al haberse quedado a la puertas de la final. “Venga Ferrán, que lo has hecho muy bien”, le decía su compañera Evelyn cuando éste rompió a llorar, antes de fundirse todos los concursantes en un abrazo de despedida.
Como en cada programa, la semifinal estuvo compuesta de tres pruebas. En la primera, los jueces acudieron disfrazados de Reyes Magos, y dieron permiso a los aspirantes a abrir cada uno su regalo. Los paquetes contenían un ingrediente con el que tuvieron que elaborar su plato en un test en el que se vieron obligados a utilizar una impresora 3D y contaron con la ayuda de Santiago Segura, participante del último MasterChef Celebrity.
Josetxo recibió los halagos del jurado y ganó una cena en el restaurante del talent, además de la responsabilidad de ser el capitán de la siguiente prueba. Previa a su elección, Jaime no se tomó demasiado bien su valoración, y acusó a Samantha de traidora. “Quedaste en que no me delatarías, que no ibas a decir que la masa se me había caído un poco. Y ahora llegas y es lo primero que dices. Me has traicionado”, afirmó.
Los abuelos, los grandes protagonistas
Aunque los jóvenes aspirantes son los protagonistas del talent culinario, anoche vieron como la atención de los espectadores la acaparaban también sus propios abuelos, que acudieron a probar sus platos en la prueba de exteriores, que tuvo lugar en Palencia.
Equipo y concursantes se desplazaron allí para rendir homenaje a las recetas tradicionales de la zona. Allí contaron con la ayuda del chef Roberto Terradillos.
El emocionante encuentro con sus abuelos
En su regreso a plató, recibieron la visita del chef Antrea Tumbarello. Josetxo y Paula fueron liberados del último reto, al haber acumulado hasta entonces el mayor número de puntos. Automáticamente, se convirtieron en finalistas, a la espera de conocer a sus otros dos acompañantes en la final. Para ello, los jóvenes cocineros restantes tuvieron que enfrentarse a tres cajas misteriosas que escondían platos típicos de la cocina italiana.
Los jueces se mostraron orgullosos del resultado final de sus platos, pero aún así se vieron obligados a elegir a los tres últimos expulsados. Jaime, Ferrán y Evelyn fueron los elegidos para decir adiós a falta de una única entrega. Así, Candela y Pachu se ganaron estar en la gran final junto a Josetxo y Paula.