El caso engorda la crónica de sucesos

Mainat pide a los medios que detengan la “persecución” y los “juicios paralelos” en torno a su intento de asesinato

Redacción

El productor televisivo Josep María Mainat ha pedido a los medios de comunicación que detengan la “persecución” a la que se están viendo sometidos tanto él como sus hijos pequeños. Y es que, tras conocerse que su exmujer supuestamente trató de asesinarlo, toda la atención mediática se ha girado sobre el que fuera miembro de La Trinca, que en el último mes ha tenido que cambiar de domicilio en tres ocasiones para evitar la vorágine de reporteros, según ha explicado en un comunicado.

“Suponiendo que [los medios] descubriesen dónde estamos, solo pasarían dos cosas: una, que tampoco declararía nada y dos, que nos tendríamos que volver a cambiar de domicilio. Por favor, no lo hagáis”, ha solicitado el empresario, que denuncia que esta “persecución mediática no es recomendable para unos pequeños que ya empiezan a preguntarse qué está pasando”.

Mainat señala que su prioridad siempre ha sido el bienestar de sus hijos, algo que ahora le está resultando “especialmente difícil debido al trato que determinados medios de comunicación están dando a los hechos que nos afectan, en forma de especulaciones, persecución y juicios paralelos, que están afectando de manera grave a toda mi familia, especialmente a mis hijos pequeños”.

En cuanto a los “conflictos judiciales” que afectan a él y a su expareja, Àngela Dobrowolski, Mainat se muestra “plenamente” confiado en que la justicia resolverá la causa. Respecto a la denuncia que su exmujer presentó contra él por supuesta agresión leve y coacciones, el productor ha negado que se esté instruyendo contra él ningún procedimiento por estos hechos que su expareja denunció cuando ya estaba siendo investigada por supuestamente intentar matarlo inyectándole insulina (el productor es diabético y esto le habría provocado un coma), informa El País.

Según el empresario, el juzgado de violencia contra la mujer recibió la denuncia de su exmujer el 11 de julio por un delito de coacciones y revelación de secretos. Aunque la mujer pidió protección, el juez se la denegó tras prestarle declaración.