Las filtraciones durante los rodajes son la peor pesadilla de producciones importantes como Juego de Tronos, que ya en temporadas anteriores ha visto cómo corrían a través de la red vídeos e informaciones sobre secuencias relevantes para las tramas.
Es por ello que HBO se vio obligada a utilizar unos trucos de seguridad especiales durante la grabación de los últimos seis episodios, tal como ha detallado recientemente Sophie Turner a Digital Spy.
Entre esas estratagemas está la de utilizar un título falso para tratar de pasar desapercibidos en las localizaciones de rodaje. Para esta octava temporada, el nombre elegido fue uno difícilmente asociable a la creación de George R.R. Martin: La cara de los ángeles.
Esta es una práctica habitual en el cine, y con ello HBO ha podido mantener alejados a los fans y posibles filtradores.
Pero este no es el único truco utilizado, y hay otros que han despistado incluso a los propios actores como el uso de nombres falsos para los intérpretes y el cambio diario de nombres de los personajes en los guiones. Según relata la actriz que da vida a Sansa Stark, así era imposible saber con quién iba a rodar hasta el mismo día.
Habrá que esperar hasta 2019 para conocer el desenlace de Juego de Tronos. Concretamente hasta la primera mitad del año, tal como desveló recientemente el jefe de programación de HBO.
Teniendo en cuenta que la fecha habitual de estreno del resto de temporadas de Juego de Tronos ha sido finales de marzo o en abril, todas las quinielas apuntan ya a esos dos meses del 2019 para el estreno del esperado adiós de la serie.