Declaraciones

Kiko Matamoros afirma que fue vetado del reencuentro de 'Crónicas Marcianas' en Telecinco tras cerrar su participación

Kiko Matamoros ha hablado sin reparos de la actual relación con Telecinco tras el final de Sálvame. O mejor dicho, la nula relación. Además de mostrarse crítico, una vez más, con la decisión de Mediaset de echar el cierre al magacín de las tardes, tras 14 años en antena, también ha revelado que le dejaron fuera del reencuentro de Crónicas Marcianas después de haber apalabrado su intervención.

Así lo dice en una extensa entrevista para Jot Down donde la televisión es solo un bloque, junto a otros sobre literatura y política. Refiriéndose al revival de Crónicas Marcianas, del que fue colaborador, cuenta: “Me llamaron al principio y les dije que sí, que no había problema, fijamos una fecha para hacerlo pero, de repente, dos o tres días antes me volvieron a llamar para comunicarme que me había caído del proyecto”.

“Ya me extrañaba que me llamaran…”, agrega el polemista, que añade: “en Telecinco, no sé por qué exactamente, pero algunos nos hemos convertido en personas non gratas”. Considera que se debe “”más que con la imagen de Sálvame, que también, con La Fábrica de la Tele, la productora“. Hay que recordar la desvinculación entre Mediaset y la compañía de Adrián Madrid y Óscar Cornejo, fijada para el 31 de diciembre; si bien durante esta primera semana de 2024 el vínculo no se ha terminado de extinguir, aun siendo inminente.

Critica la estrategia de las nuevas tardes de Telecinco

Matamoros estima que se equivocaron al cancelar Sálvame “porque han perdido mucha audiencia aunque dicen que tienen muy buenos resultados económicos”, y desacredita la versión del desgaste de audiencia como clave para la decisión.

“Lo que pasa es que nos lo ponían cada vez más difícil con el código ético que se inventaron y con la prohibición de hablar de determinados personajes… Mira, donde Telecinco hace ahora un ocho por ciento, nosotros hacíamos un once, y con veinticinco minutos de publicidad en esa hora, y ahora van limpios, descargaditos de anuncios, para salvar el formato”, opina sobre TardeAR.

De Ana Rosa Quintana, a la que ya dedicó epítetos poco cariñosos en su momento, dice: “Ha renunciado a la franja de cuatro a cinco de la tarde para mejorar su dato, pero le cuesta llegar al diez, y decía que su objetivo mínimo era el catorce. En fin, es un negocio complicado y solo los genios entienden de esto, alguno ya no está y se nota”.

Matamoros culmina haciendo su interpretación del planteamiento: “Apostaron por hacer una televisión de derechas de cara a las generales que se preveían para estas fechas; al adelantarse y, tras perder las elecciones, no tiene mucho sentido el papel que habían previsto para Ana Rosa como predicadora política. No vas a estar cuatro años dándote de hostias con el poder”. El televisivo, finalmente, afirma “respetar” la cancelación porque “están en su derecho”, pero considera “bastante irrespetuosa” la manera de comunicarla.