La Voz 5 celebró este viernes sus últimas batallas con una gala repleta de nervios y emociones a flor de piel. Cada coach tuvo que elegir a tres de sus nueve miembros para los esperados directos, y las decisiones no fueron nada fáciles. Tanto fue así que se vivieron momentos de serias dudas e incluso hubo algún que otro robo in extremis.
Los seis concursantes no elegidos de cada grupo tendrán una nueva oportunidad la próxima semana en El último asalto, donde se configurarán los equipos definitivos para las galas en directo.
Un robo in extremis para pasar a los directos
Un robo in extremisUna de las sorpresas de la noche la dio Pablo López, que decidió rescatar a Jesús, eliminado del equipo de Juanes, cuando el joven ya había abandonado el plató. La apuesta del cantante por el talento de Jesús fue fuerte, pues le eligió como uno de sus tres aspirantes que pasan a los directos. Los otros dos son Renzo y Jennifer.
Juanes se decidió por Berta, Carmelo y Elena, ex de La Voz Kids, mientras que Malú apostó por otro rostro ya veterano en el talent: Ricardo, ex de La Voz Portugal. Junto a él, Genara y Charo participarán en los directos en representación del equipo de Malú.
Por último, Manuel Carrasco salvó del Último asalto las voces de Fredrik, a quien prometió un single, Gio y Luna.
Pablo López y Antonio Orozco se “intercambian” en La Voz
Uno de los momentos más destacados de la noche llegó con la despedida de Nico, ex de Eurojunior, que no ha logrado pasar de fase en La Voz. Su batalla con Carlos fue una de las más complicadas para Pablo López, que cedió “el marrón” a su asesor Antonio Orozco.
“Yo no soy padre, soy hijo, y creo que él debería tomar la decisión y decirlo”, dijo el coach a Orozco, con quien se intercambió el sillón. “Esto no es una coña, está pasando”, comentó López. Ya en el adiós del expulsado, Orozco le devolvió el “recado”: “Te voy a pedir que te bajes del escenario”, dijo el asesor al coach entre risas. “Tenéis auténticas matrimoniadas”, comentó Jesús Vázquez.