Nyno Vargas y Omar Montes fueron dos de los invitados del ¿Quién educa a quién? emitido tras el tercer capítulo de Hit que trató el tema de los prejuicios, de la aceptación y de la vida en redes. Mamen Asencio les preguntó por la necesidad de incluir violencia y machismo en la letra de sus canciones y ambos acabaron pidiendo que “no se tomaran a pecho lo que dicen”.
Además de ellos, al debate asistió una influencer, un fiscal de menores, un joven “con pasado turbulento que ha salido adelante”, un chico que “se dedica a sacar a jóvenes de bandas latinas” y una orientadora en secundaria.
Aunque Nyno sí estuvo en plató sentado junto al resto de tertulianos, Montes conectó más tarde con el programa, por videollamada desde su casa.
Nyno Vargas: “Una paliza vende más que una flor”
Vargas fue el encargado de arrancar la entrega asegurando que lo que refleja Hit “lo he visto y peor, salí con mi música”. Tras ello, Mamen Asencio le preguntó por la importancia de las redes en su vida: “No soy narcisista. Las redes son para mí una herramienta de trabajo, pero si no me dedicara a lo que me dedico no tendría porque en realidad no me gustan. Las veo innecesarias, me quitan tiempo de mi actividad y las uso por mi trabajo”, aseguró.
Pero añadió que sí que había visto a “chavales jóvenes gastarse el dinero para comprar alcohol y hacerse una foto con él y posturear”. Por lo que señalaba que “al final viven una ficción”.
Preguntado por las letras machistas de la música, él tiró balones fuera: “No considero que mis letras sean machistas porque las cuido mucho. Que algunas canciones sí que tengan que ver con relación sexual es cierto pero ahí no entra el machismo”, aseguró.
Aunque a la vez, aseguró que si ese tipo de letras tiene éxito es por algo: “¿Al final quién consume esta música? Algo está pasando en el mundo, a la gente le gusta. La canción de La Jeepeta tiene 500 millones de visitas porque al final a la gente le gusta, y los artistas se dan cuenta de esa ola y aunque yo no soy partidario de compartirlas... pero si sacamos una canción que habla de amor y no tiene tanta repercusión, a dónde van a ir”.
Una reflexión que Mamen no compartió: “¿Entonces todo por la audiencia? No lo veo”, comentó la presentadora que más tarde volvía a señalarle lo mismo hablando de violencia. Cuando Nyno aseguró que en sus videoclips vendía más “una paliza que dar una flor”, ella preguntó incrédula: “Entonces, ¿tenemos que hacerlo porque vende?”.
Omar Montes: “A veces se nos juzga demasiado”
Siguiendo en la línea de la violencia fue cuando el programa conectó con Montes para conocer su opinión sobre la exaltación de este tipo de situaciones tanto en canciones, como videojuegos.
Mamen preguntó a Omar por la necesidad de incluir violencia en su videoclip “No puedo amar” cuando está hablando de una relación de pareja y este contestó: “Cuando un actor, como Mario Casas por ejemplo, hace de policía corrupto está interpretando para divertir a una persona que quiere ver una película. No te tienes que tomar al pie de la letra que salgo apaleado en el videoclip, tienes que verlo como diversión y disfrutar”, explicó.
A lo que la presentadora respondió dudando de si los adolescentes captaban ese mensaje: “Un tanto por ciento elevado de mi público entiende que es una diversión, una ficción. Pero es imposible ir uno por uno explicándole a tu público. Veo con mi hijo películas de miedo y no se toma al pie de la letra las cosas raras. La gente entiende que somos personas que actuamos”.
Pero Mamen insistió en que él debería dar ejemplo de que no hace falta la violencia para la música, a lo que Montes respondió: “Creo que no deberíamos tener la piel tan fina y disfrutar más con la música, las películas y a veces se nos juzga demasiado y más de la cuenta. Claro que tengo que dar buenos mensajes en los colegios y en mi barrio, no he probado la droga en mi vida, soy anti todo eso, adoro a mi abuela y mi madre y soy defensor de las mujeres pero a veces en los papeles que me meto no doy el mejor mensaje pero solo lo hago por divertir. Me gustaría dar mejores mensajes en la música pero que no se tomen a pecho lo que digo”, acabó expresando.