Francia celebró anoche la segunda semifinal de Destination Eurovision, de donde salieron los últimos 4 finalistas que, junto a los 4 de la primera semifinal, se jugarán el próximo sábado representar al país galo en el festival.
Sin embargo, la elección de estos 4 últimos aspirantes se ha visto eclipsada por lo que ocurrió en un momento de la gala. La vigente ganadora de Eurovisión, la israelí Netta Barzilai, acudió como invitada a la misma para interpretar Toy, la canción que le dio la victoria en Lisboa 2018. Su actuación se desarrolló sin problemas hasta su conclusión, cuando un grupo de manifestantes se subió al escenario con pancartas que decían lo siguiente: “No al Eurovisión 2019 en Israel”.
El grupo internacional BDS (Boicot, Desinversiones y Sanciones) reivindicó lo ocurrido durante la celebración de la gala, asegurando que fueron varios de sus militantes los que protagonizaron el incidente. Un acto reivindicativo que forma parte de su campaña contra “la colonización, el apartheid y la ocupación israelí”.
Tras varios segundos mostrando las pancartas ante las cámaras -que ampliaron el plano para que se viera lo mínimo posible en pantalla-, la seguridad del evento se llevó a los manifestantes con la máxima celeridad posible. Aun así, no pudieron evitar que esta imagen recorriera las redes sociales, viéndose obligada France 2, la cadena que emitió la gala en directo, a emitir un comunicado en la edición gala de 20 minutos para recordar que “Eurovisión es, ante todo, un entretenimiento de una escala internacional y única, abierto a una gran diversidad artística”. Y también que la música “no tiene fronteras” y representa la “ambición universal del diálogo entre pueblos, la apertura y la convivencia”.
Con estos hechos, la controvertida celebración del festival en Israel suma una polémica más. Solo aquí en España, candidatas como Natalia y María han mostrado su malestar porque el certamen tenga lugar en suelo israelí. Además, una veintena de periodistas pidieron a la administradora única de RTVE, Rosa María Mateo, que España no acuda al certamen por este motivo. Y Fermín Muguruza y Kase. O fueron algunos de los 140 artistas que firmaron una carta en The Guardian llamando a boicotear esta edición de Eurovisión.