Marc Giró montó una clase de sexo anal en su 'Late Xou' y recogió la queja de Candela Peña contra los ginecólogos

Hace un mes, Rappel leyó el futuro de Marc Giró a través de una foto de su ano. El momento, protagonizado por el vidente a petición del presentador de Late Xou, no gustó nada a un espectador del programa de La 1, que se lo hizo saber al propio Giró a través de este comentario en las redes sociales: “¿Cómo haces para leer un ojete donde ha pasado más gente que en el túnel del metro?”.

El catalán ni corto ni perezoso, no solo respondió a este comentario en la entrega de este martes, sino que hizo toda una performance alrededor de él, clase divulgativa sobre el sexo anal incluida. “Gracias a este comentario ha llegado el momento que todos estábamos esperando. ¡Vamos a hablar por fin, en Televisión Española, de sexo anal!”, gritó el showman antes de empezar a bailar con un grupo de bailarines que parecían sacados del carnaval de Brasil. “Cuánto entusiasmo. Si lo llego a saber, saco el tema a colación antes”, añadió tras ver la reacción de su público.

“Lo primero que queda claro leyendo el mensaje es que este espectador tiene mi culo totalmente mitificado. A nivel de penetración anal no me ha ido del todo mal (...) Pero tampoco me ha ido tan bien para que mi culo se pueda comparar con un túnel del metro. Pero quién soy para desactivar la fantasía de este caballero”, continuó, con ironía, el presentador.

Acto seguido, Giró quiso “precisar una serie de cosas” sobre “el arte de dar por culo”. Por ejemplo, desmintió que “las personas homosexuales estén todo el día culito en pompa, dale que te pego”: “Esto no es exactamente así. Ya nos gustaría, pero hay que hacer otras cosas. Trabajar, sin ir más lejos”. Además, señaló que la teoría de que el sexo anal solo gusta a los homosexuales “no se sotiente”, pues a “muchos” hombres heterosexuales “les parece muy mala idea cuando se trata de su propio orificio, pero muy buena cuando el orificio es el de sus mujeres, que además les importa, nunca mejor dicho, un buen pito lo del sexo anal, por lo que yo me sé”.

“Además, los hombres cishetero tienen culo, pero a diferencia de la mayoría de las mujeres, tienen próstata, igual que tenemos los maricones. Y la próstata es, a mi humilde parecer, la auténtica razón de ser de esta ancestral práctica sexual. Y como esto es servicio público, vamos a dar a continuación unos tips (consejos) para estimular la próstata y animar así, nunca mejor dicho, a todos los hombres que todavía no lo han probado, a que se pongan a ello”, expuso antes de dar paso a una doctora “experta en sexo aplicado”, que entró al plató con una ilustración anatómica.

A continuación, Giró preguntó a la experta cuáles los beneficios del sexo anal. “Promueve un buen flujo sanguíneo a nivel de la próstata y el perineo, lo que ayuda a combatir las infecciones urinarias. También ayuda al control de la micción, muy importante, promueve el placer sexual y mejora las erecciones”. “Menudo chollo esto de la sodomía”, apuntó Marc Giró. “Sí, señor, quién tuviera próstata”, añadió la experta. Después, la experta explicó cómo se puede uno mismo estimular el ano, entre otras cosas relacionadas con la materia. “Esto sí que es servicio público y lo demás son tonterías”, presumió Marc Giró, que cerró su monólogo inicial con la siguiente reflexión: “Creo firmemente que si los hombres dedicaran más tiempo a estimularse la próstata y menos a la geopolítica, las cosas en el planeta Tierra nos irían a todes bastante mejor”.

Candela Peña pidió “un poco de tacto” a los ginecólogos

Después, Candela Peña aprovechó esta clase de sexo anal para hablar de su última visita al ginecólogo. La actriz lamentó lo “mala” que es la menopausia, pero también pidió a los ginecólogos que tengan “un poquito de tacto” en sus consultas, “porque tú vas allí y te dicen unas cosas que te quieres matar”.

“Te dice 'pero, ¿desde cuándo usted no tal?' Y digo '¿no tal? ¿no qué?' Y dice 'no, usted… ¿no hay demanda? ¿No le demandan a usted?' Digo 'si se refiere usted a un caballero, pues no, no hay demanda'. Unas cosas violentas…”, denunció la intérprete. “Dice 'pero, ¿aquí no entra nadie al local?' Y dices tú 'pero, ¿no entra qué, un mueble de Ikea?'. No le estoy captando”, prosiguió la catalana. “No sé cómo afrontar esta contestación, porque le tienes que decir a aquel señor, pues oye, igual hay gente que le gusta tomarse la caña en la puerta y no entrar al local”, añadió ante un Marc Giró que apenas podía aguantarse la cara.

“Ya ver la cara que pone este hombre cuando tú estás allí en aquella situación tan terrorífica… Porque es: 'quite la braga, quite la falda, piernita para acá, piernita para acá', y cuando tú ya estás allí, te dice, 'culito un poquito más para adelante', y tú, '¿un poquito más para adelante?”, siguió la actriz: “'Tranquila, que voy a ir despacito'. 'Y ahora veo que el hombre hace 'uf'. Rebufa y dice 'uf, esto está ya'… Y tú te quieres matar”, concluyó la protagonista de series como Hierro y El caso Asunta.