La marca 'Gran Hermano' vuelve a Telecinco sin cerrarse aún el juicio por el “caso Carlota”
En la televisión española hay muy pocos killer formats, como se denomina a los formatos que garantizan el liderazgo en cada emisión y se convierten en apuestas de éxito seguro para las cadenas. Actualmente puede señalarse a Supervivientes en Mediaset, y por eso la noticia de que Telecinco ha iniciado la producción de GH VIP 8 es, a nivel televisivo, tan relevante.
El “padre” de todos los realities, el que fuera buque insignia y lo más visto de la cadena más vista de España, regresa con la que será la 29ª edición del formato en nuestro país, tras las diez protagonizadas por famosos -siete de GH VIP, dos de GH: El Reencuentro y una de GH Dúo- y las 18 llevadas a cabo con anónimos. Y lo hará, a la espera de su fecha de estreno, prácticamente dos años después de emitir su última gala, en la que Adara se proclamó ganadora de GH VIP 7 ante un colosal 38.5% de cuota y 4.231.000 espectadores, el mejor share histórico de todas las galas de su larga trayectoria.
El motivo de su ausencia, demostrado está, no ha sido que acusase el desgaste en sus audiencias. Algo que por otro lado sí pasaba ya con su versión de anónimos, que en su 18ª edición llamada GH Revolution se conformó con un promedio del 14.3% de cuota y 1,5 millones de espectadores. Su larga suspensión se ha debido al presunto abuso sexual de José María López a Carlota Prado en la casa de GH Revolution en el año 2017, y que en el 2019 al hablar la joven provocó una crisis de anunciantes que llevó a GH VIP a emitirse casi sin publicidad, y a que Mediaset suspendiese la emisión de su exitosa marca.
La cronología del “Caso Carlota”
Los hechos ocurrieron en la madrugada del 3 al 4 de noviembre de 2017, en la casa de GH Revolution, la 18ª edición con anónimos del reality. Sin desvelar los motivos, la dirección de Gran Hermano expulsó al concursante José María López “por conducta intolerable” y vio “oportuno que abandonase de momento” Carlota Prado, con la que había iniciado una relación en el programa. Al día siguiente, José María comparte un vídeo en el que da “muchas gracias por el apoyo que estoy recibiendo”.
48 horas después se supo que la Guardia Civil investigaba un posible delito de abuso sexual dentro de la casa, tras la denuncia presentada por un responsable del programa. Fue entonces cuando Mediaset rompió su silencio y el de la productora tras dos días y emitió un comunicado en el que pedía “respetar la intimidad de las personas afectadas” y afirmaba: “Permanecemos atentos a los resultados de la investigación”. Además, Jordi González aclaró en el 'Debate' de anoche que José María López era “el único expulsado”, y que Carlota ha estado “con un equipo de psicólogos que le han aconsejado que se mantenga fuera de la casa y podría reincorporarse”.
Y así fue. Carlota Prado volvió al reality, sin hasta ese momento haber denunciado lo sucedido, y la misma Telecinco explotó el presunto caso de abuso sexual, lo que le valió para elevar su audiencia pese al rechazo general que se materializó en una denuncia del Instituto de la Mujer que decía que Gran Hermano es “caldo de cultivo de violencia hacia las mujeres”. El programa siguió adelante con normalidad, y el 24 de noviembre, veinte días después, Carlota Prado fue expulsada y el reality decidió esquivar el presunto abuso sexual y las imágenes con José María.
En diciembre de ese mismo año Carlota Prado denunció finalmente a José María López, y el llamado “Caso Carlota” no reapareció mediáticamente hasta dos años después.
En julio de 2019 Carlota Prado rompe su silencio y habla de lo sucedido en su Instagram, asegurando estar esperando la fecha del juicio y lamentando que en todo ese tiempo ella seguía “sin poder rehacer mi vida”. En octubre de ese mismo año la deriva judicial da un nuevo paso. La jueza consideró que había indicios de un delito de abuso sexual, por lo que pidió a las partes una acusación para José María López, después de que el auto detallase lo sucedido y en su declaración Carlota Prado acusase a la cadena de “omisión de socorro” y denunciase que “es mi cuerpo el que sale ahí, inconsciente y violado”. En su defensa, el acusado pidió que el reality fuera investigado porque “si hay un abuso, el 'Súper' abre la puerta y saca a quien tenga que sacar, uno no se espera 17 horas para ir a denunciar”.
Las acusaciones que apuntaban a la productora y a la cadena se intensificaron cuando Carlota Prado concedió una entrevista a El Confidencial en la que denunció la falta de protocolo y sensibilidad que mostró el programa a la hora de ponerle las imágenes en el confesionario: “Jamás me preguntaron si yo quería ver eso... Me pusieron el vídeo sin avisarme de lo que estaba a punto de ver”. Poco después, el mismo medio mostró las imágenes de ese momento, en el que la productora pidió silencio a la joven: “Es mejor que no salga de aquí”.
Fue entonces cuando las reacciones se dispararon. La productora Endemol se pronunció por primera vez el 23 de noviembre de 2019, dos años después, para aclarar que “ningún contenido se grabó para ser emitido”. El avance judicial y las declaraciones de Carlota Prado provocaron una crítica general contra el formato, que entonces emitía su edición GH VIP 7, que cristalizó en el famoso boicot de anunciantes: el primero el 25 de noviembre, cuatro el día 26, diecisiete el día 27, treinta y tres el día 28, y más de cuarenta el día 29. El reality se emitía prácticamente sin publicidad.
En esos cinco días fatídicos para sus intereses, la productora Zeppelin pidió “disculpas” por primera vez de manera pública a Carlota Prado, dos años después y ante la fuga de anunciantes. Sin embargo, Mediaset optó por no asumir responsabilidades y señalar a Atresmedia, asegurando que el grupo rival era el artífice de “acciones de desprestigio avivadas de manera desleal desde los espacios y programas informativos de Antena 3, LaSexta, Onda Cero y algunos de sus portales verticales, a los que también se suma el diario La Razón”. Algo por lo que el grupo se vio obligado por orden judicial a emitir una petición de rectificación en pantalla una primera vez en julio de 2020, y una segunda vez en enero de 2021, ambas en Todo es mentira de Cuatro. Lo cierto es que la repercusión del caso saltó a los informativos nacionales (en laSexta, y en el Telediario de TVE) y alcanzó medios internacionales como la BBC o el diario The New York Times.
GH VIP 7 terminó el 19 de diciembre de 2019, y un solo día después se conoció que la Fiscalía pedía dos años y medio de cárcel para José María López por abuso sexual a Carlota Prado, además de una indemnización de 6.000 euros por los daños morales causados a la víctima. La misma cantidad reclamaba a la productora del programa, Zeppelin TV, por los daños ocasionados por mostrar a la concursante el vídeo de lo ocurrido en el confesionario de la casa.
La reacción de cadena y productora fue la de proteger al formato, por lo que un mes después, en enero de 2020, apostaron por El tiempo del descuento para Telecinco logrando así estirar el culebrón de la vencedora Adara y al mismo tiempo huir de la marca Gran Hermano, que desde entonces no ha vuelto a Mediaset.
Otro mes más tarde, ya en febrero de 2020, se produjo la apertura del juicio oral y se conoció que la acusación pedía siete años de cárcel para José María López por abuso sexual, que éste no pueda acercarse a Carlota Prado a menos de 500 metros durante siete años, y que el acusado pase otros siete en libertad vigilada. Además, la acusación solicitó que López indemnice a Prado con 100.000 euros por daños morales, y Zeppelin TV, productora del reality de Mediaset, haga lo propio con otros 100.000 euros por el mismo motivo.
En mayo surgió otra polémica cuando Carlota Prado denunció que la productora Zeppelin TV le ofreció “25.000 euros y desarrollo profesional”, lo que fue visto como un intento por comprar su silencio ante el que la joven zanjó: “Mi integridad no está en venta”. La productora se apresuró a justificarse, explicando que “pretendía ofrecer facilidades y apoyo económico en el proceso legal” y añadiendo que desde el primer momento “Zeppelin se ha volcado en intentar ayudarla, primero ofreciendo asistencia psicológica y ahora profesional y económica”. Un mes después, en junio de 2020, la productora anunció que Álvaro Díaz dejaba su puesto como Director General. A los días, se desveló que fichaba por Netflix España como nuevo Director de Entretenimiento, y bajo su mando ya se promociona Insiders, el nuevo GH de la plataforma.
A finales de 2020, Mediaset alimenta la vuelta de 'GH'
Pasado ese verano y ya comenzada la nueva temporada televisiva, en noviembre de 2020 Telecinco dio la sorpresa: “Gran Hermano volverá el año que viene”. Días después, para construir la nueva casa desde los cimientos, la productora Zeppelin anunció su nuevo protocolo de prevención y actuación ante situaciones de abusos en entornos de alta visibilidad, un manual que puso “a disposición de la industria audiovisual” en forma de guía con más de 40 acciones para prevenir situaciones de abuso o agresión sexual, así como pautas para identificarlas y gestionar la supervisión posterior. La propia compañía de Banijay Iberia explicó que se trataba del producto de una “reflexión honesta y sincera sobre todo aquello que debemos mejorar y reforzar” tras el caso de Carlota Prado, y añadió que para realizarlo se había valido de expertos en la materia, además de compartir el resultado con organizaciones feministas. Pese a todo, 2020 se cerró como el primer año sin la marca Gran Hermano en Telecinco. Ya en este 2021, a mediados de enero Telecinco actualizó el estado del posible regreso de Gran Hermano, sin más noticias hasta que este mismo 8 de junio anunció el inicio de la producción de GH VIP 8.
Al mismo tiempo, Carlota Prado reapareció mediáticamente en mayo. Fue mediante una entrevista en la que denunció de nuevo a la productora y a la cadena por algo que hasta ahora se desconocía: “Sabían que de pequeña me habían violado y no lo tuvieron en cuenta”. La joven reiteró que la forma en que le hicieron ver las imágenes en el confesionario “es alevosía en estado puro. Sabían que yo ya había pasado por algo así. Es inhumano”, y afirmó que todavía no sabe “cómo ninguna de todas esas personas [que estaban de guardia en la casa] dijo que entraba a parar la situación, aunque perdiera el trabajo (...) Por supuesto que podían haberlo evitado”. “Me culpé de haber entrado en ese programa. No te puedes ni imaginar hasta qué punto pude llegar a arrepentirme”, confesó. Poco después, agradeció los apoyos y la unión tres revivir lo que le ocurrió en GH.
Zeppelin parece haber hecho propósito de enmienda, y afronta la producción del nuevo GH VIP 8 sin el máximo responsable que la compañía tenía el día de los hechos, y tras revisar y publicar su nuevo protocolo de prevención. Mediaset, por su parte, no ha asumido ninguna responsabilidad hasta el momento y sólo ha esperado el tiempo que ha creído conveniente para recuperar su marca más preciada, la de Gran Hermano. El juicio a José María López espera sentencia, que podría volver a situar en el foco al formato si la productora que ya prepara una nueva edición acaba siendo condenada.