Supervivientes 2018 está resultando tan exitosa como accidentada, a juzgar por la cantidad de bajas que se están produciendo en apenas un mes de concurso. La última de ellas, la de María Jesús Ruiz.
La modelo debe abandonar el concurso, tal y como ha comunicado Sálvame en la tarde del viernes 13 de abril. A diferencia de las salidas de Adrián Rodríguez y María Lapiedra, la suya es una marcha obligada por asuntos judiciales, y podrá retomar su participación después de solucionarlos.
Ruiz ha de comparecer en el juicio por supuestos malos tratos contra su expareja, el empresario jerezano José María Ruiz Gilgado. La vista oral es el próximo lunes 16 de abril en el Juzgado de lo Penal Nº4 de Jaén.
La concursante del reality de Telecinco había intentado aplazar esta cita con el juez. De hecho, su abogado presentó una solicitud para ello, haciendo notar que no podía acudir por motivos laborales, tal y como recoge El Diario de Jaén. El juzgado, sin embargo, rechazó la petición, al entender que la propia interesada había avisado a la productora del programa, Bulldog, de la existencia de este juicio.
El de María Jesús Ruiz no será un adiós definitivo a Supervivientes, pues tal como ha anunciado este sábado Socialité, la modelo regresará a Honduras el próximo miércoles tras la vista en el juzgado.