La semana pasada Lydia Lozano se duplicó por sorpresa en el plató de Sálvame. Un clon de la colaboradora, un imitador perfecto, se hizo pasar por ella ante la sorpresa de los espectadores. Pero la inesperada visita tenía un objetivo: anunciar que el programa de Telecinco está buscando personas que se parezcan mucho a sus colaboradores.
Este jueves le ha tocado el turno a María Patiño. Mientras la periodista se disponía a hacer uno de sus alegatos, uno de esos discursos que hace mirando fijamente a cámara, de la nada surgía su doble.
“¡Todos necesitamos maquillaje y peluquería!”, gritaba el clon de Patiño, aparecido por sorpresa entre los elementos del decorado. La nueva colaboradora del programa traía, además, dos peluches que resultaron ser la imitación barata de las chinchillas de Patiño, sus dos mascotas más queridas.
“Sujétame las chinchillas”, le ha pedido nada más entrar en plató. Patiño no paraba de reír, le estaba gustando esa versión tan suya que hablaba como ella, hacía los gestos como ella, mandaba callar a sus compañeros como ella y canta No dejes de soñar como sólo sabe hacer ella.
Ambas se han unido bajo este tema de Manuel Carrasco que María Patiño ha convertido en su himno particular. “Lo más importante de esta vida es soñar”, le ha dicho eufórica a su doble. Con el plató enloquecido y la música por todo lo alto, los colaboradores de Sálvame se han entregado completamente al show, que ha dejado imágenes memorables.
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