'MasterChef 11' invitó a las únicas dos parejas del programa que siguen juntas y expulsó a la hermana de Alguersuari
MasterChef 11 volvió a vivir una de esas noches indeseables para muchos aspirantes. En la primera prueba fue Ana la que acabó llorando al escuchar que los jueces criticaban su “falta de humildad”.
Pero fue peor para Marta Alguersuari cuando en la eliminación entregó un plato del que “no se sentía orgullosa” y aún así Pepe, Jordi y Samantha pidieron que alguien lo probara para que confirmara que “no se podía comer”. Tras ello, además, la expulsaron.
Todo ello en una entrega en la que celebraron un baile de promoción en la que algunos se declararon a otros, y a la que acudirán María Zurita y Xavier Deltell.
Primera prueba con las dos parejas que se conocieron en las cocinas
El jurado celebró un baile de promoción en el que los aspirantes tuvieron que declararse de una forma original y creativa a quien quisieran como pareja de baile: Marta a David, Jorge Juan a Ana, Eneko a Lluís, Fray Marcos y Francesc, Claudia a Jotha, Camino a Luca y Pilu a Álex.
Cada pareja surgida del baile tuvo que cocinar dos aperitivos propuestos por los jueces y hacerlo esposados: tartar de atún, roast beef, ceviche de corvina, tortillita de camarones, tosta de pechuga, palitos de pan, taco de langostinos, pasta wantong y bao de pollo.
Durante el cocinado, Luca animó a su compañera a “robar”; muchos tuvieron celos de Marta y David; la química de Claudia y Jotha fue indiscutible; pero el trabajo más errado fue el de fueron Ana y Jorge Juan que no llegaron ni a emplatar y Jordi Cruz les obligó a presentar lo que tuvieran: “Habéis estado de cachondeo. Esto es una vergüenza. No quiero faltas de respeto, no la pagues conmigo”, dijo el chef a la aspirante desesperada.
Los comensales fueron la sorpresa de la prueba: “Son especiales para nosotros porque encontraron el amor en las cocinas” y dieron paso a las parejas formadas por Sofía y Victor (“los alcaldes”) de la sexta edición, Jokin y Eva de la décima, Luna y Eva de la octava que confesaron haber tenido “atracción pero no conexión”, por lo que son amigos.
Tras la cata, Jordi abroncó a Ana y Jorge Juan por su actitud, pero ella se derrumbaba al escuchar que “no era humilde por no gestionar el fracaso”. También acabó llorando Luca por el mal resultado de su plato. Mientras que Eneko y Lluís fueron escogidos como los mejores, seguidos por Pilu y Álex.
Prueba de eliminación con la despedida de la “madre” Marta
A la prueba de eliminación entraron con delantales negros Luca, Camino, Ana, Jorge Juan, Marta, David, Fray Marcos y Francesc. Allí tuvieron que cocinar con los ingredientes de una de las dos Cajas Misteriosas que encontraron.
Si elegían la caja destapada, tenían que utilizar todos los ingredientes para hacer un plato en 60 minutos. En cambio, si se quedaban con la caja secreta lo harían sin saber los ingredientes que contenía.
Tras el cocinado, llegó el momento de la cata: Luca fue el primero en presentar un gallo San Pedro con puré con “pocos defectos y jugoso”, Jorge Juan entregó una paella con saltedo que se quedó “insulso y planito”, Fray Marcos cocinó una anguila “extraordinaria”, David les llevó un carpaccio con arroz “muy rico, potente y delicado”, Francesc presentó un arroz “falto de cocción”, Camino llegó con un plato que era “muy buena idea pero falta de sal” y Ana entregó un carpaccio de gambas “falta de sal, de cocción y de sazón”.
Para acabar, también Marta apostó por una anguila de la que ella misma confesó “no sentirse orgullosa”. Los jueces, al probarla, estuvieron de acuerdo: “No se puede comer por ser una goma, el cereal está crudo, es un mal plato”. Momento en el que pidieron a sus compañeros que la probaran. Ella pidió que no lo hicieran, que ya sabía que no estaba buena, pero aún así convencieron a Jorge Juan para que lo hiciera: “Sabemos que en la casa habláis mucho y así lo comprobáis”, dijo Jordi.
Por todo ello, Pepe sentenció: “El aspirante que no debe continuar en cocinas es Marta, tu plato no se podía comer”.