La nueva entrega de MasterChef Celebrity 9 fue una de las 'corazoneras' de la edición, al emitir el momento en el que Jordi Cruz presentó a Hiba Abouk y Álvaro Muñoz Escassi, quienes levantarían rumores de romance durante el verano pasado. Un romance (o no) que, claramante, se fraguó en las cocinas.
No fue el único momento curioso del programa, también llamaron la atención los cambios de look de Hiba, de Marina Rivers y de José Lamuño, por cumplir la promesa de la semana anterior.
Así como también fue aplaudido el reencuentro de Manu Baqueiro con Itziar Miranda (los eternos Marcelino y Manolita) en los exteriores. Minutos antes de que ella se convirtiera en la expulsada de la semana, tras cocinar el peor plato en la eliminación.
Todo ello en un programa en el que los aspirantes reinterpretaron los platos españoles para internacionalizarlos, se marcharon a un chiringuito para trabajar como auténticos profesionales y tuvieron 10 minutos para memorizar, por turnos, una receta de vanguardia.
Primera prueba con el brillo de Pitingo y Cristina Cifuentes
Para empezar Lorena Castell y el chef José Pizarro, pidieron a los aspirantes que les hicieran viajar. Para ello, tuvieron que reinterpretar los platos españoles que triunfan fuera de nuestras fronteras, usando los ingredientes principales de cada receta y aplicando todas las técnicas aprendidas estas semanas.
Durante el tiempo de cocinado, muchos se mostraron seguros de sus platos, pero poco a poco su seguridad fue cayendo por las técnicas modernas que debían usar.
Llegó el momento de la cata: Francis presentó una deconstrucción de gazpacho “totalmente equivocada”, Itziar entregó un pato “tieso, duro y mal frito”, Raúl hizo una fideuá “cruda”, Pocholo intentó una genialidad de “pantata” que elevó la “creatividad al máximo”, Marina hizo un bocata de calamares con algunos fallos, Hiba no cocinó bien el rabo de toro, Inés cocinó una emulsión de chorizo “mal entendido”, Pitingo elaboró una versión amateur de una croqueta, José hizo una espuma de chorizo que se “esperaban” peor y Cifuentes apostó por una brandada de bacalao que se llevó todos los aplausos.
Por todo ello, los jueces señalaron a Cifuentes y Pitingo como los mejores del reto. Pero entre los dos, la que destacó fue ella, que donó los 4.000 euros a la ONG PRAMP y se garantizó un plato en la carta del Restaurante MasterChef durante toda la temporada.
Prueba de exteriores con el encuentro de Hiba y Escassi
Aspirantes y equipo pusieron rumbo a Tarifa (Cádiz), donde el chef Dani García les acogió en su sofisticado chiringuito. Tuvieron que elaborar dos menús bajo las órdenes de dos cocineros y para 80 amantes del deporte acuático.
Bajo las órdenes del chef Marcos se vistieron de azul Inés, Marina, Hiba, Itziar y Cifuentes; mientras que de rojo se ataviaron Pocholo, Raúl, Pitingo, Francis y Lamuño a los que capitaneó la chef Raquel.
Allí reapareció Álvaro Muñoz Escassi para dar una clase acelerada de kitesurf a Pepe Rodríguez y a Jordi Cruz. A cambio, le invitaron a degustar las elaboraciones de los aspirantes. Al saber de su presencia, la primera que preguntó por él fue Hiba: “¿Por qué no entra Escassi a ayudarnos?”. A lo que Jordi respondió con sorna: “¿Por qué quieres ver a Escassi?” y ella respondió que solo poruqe “cocina muy bien”.
Minutos después, Jordi presentaba a Escassi e Hiba. Con él delante, la actriz se sinceraba: “No le conocía, vi el ulitmo MasterChef Celebrity y me sorprendió un montón. Me parece que tiene una personalidad increíble y es muy buena gente”. El jinete la abrazó: “Qué bonita eres, encantado de conocerte”.
Al ver la escena, Jordi les separó: “No me gusta que me distraigas a las chicas del equipo. Estaba muy concentrada hasta que has llegado tú”, le dijo a Escassi, pero Hiba aseguró que no se distraía.
Pero no fue el único reencuentro, también Manu Baqueiro sorprendió a Itziar que corrió a abrazarle, totalmente emocionada. “Se han juntado ahí Manolita y Marcelino”, comentaba el resto de aspirantes.
Tras servir los menús, llegó el momento de la valoración de los jueces. Jordi criticó los platos de las chicas, por no parecerse a los originales, excepto el postre. Mientras que Pepe aplaudió el primero de los chicos, aunque el postre “no podía ser más feo”. Por lo que los ganadores fueron ellos.
Prueba de eliminación con la expulsión de Itziar Miranda
Para finalizar, Inés, Marina, Hiba, Itziar y Cifuentes llegaron con los delantales negros a unas cocinas que se transformaron en un museo con un cuadro que representaba un plato de vanguardia de altísimo nivel, elaborado por el chef Toño Pérez. Durante 10 minutos las aspirantes pudieron ver, por turnos, la receta de la obra que replicarían en 90 minutos.
Hiba fue la primera aspirante en leer la receta y activó un pulsador y el tiempo comenzó a correr. Fue la que más tiempo gastó. Cuando terminó, paró el cronómetro y Cifuentes leyó su receta. Tras ella, Itziar, Marina e Inés se quedó con la última pero con más tiempo. Después la receta se autodestruyó.
Se pusieron manos en la masa y al acabar el tiempo, entregaron sus elaboraciones. La de Marina estaba “rica pero desproporcionadas”, Hiba entregó un emplatado “terrorífico”, Cifuentes “no cocinó mal pero tampoco bien”, Inés hizo el plato más parecido estéticamente e Itziar la más alejada, “con defectos por todos lados”.
Ante tales valoraciones, la decisión final era evidente: “El aspirante que no continúa en las cocinas es Itziar”, sentenció Pepe.