El Hormiguero ha hablado esta noche con Ernesto Sevilla que está confinado en su casa con su perro.
El humorista ha explicado que en los paseos con su mascota no tiene grandes problemas ya que guarda la distancia con la gente, pero “ya la guardaba de antes”, confesaba entre risas.
A su vez, El Monaguillo explicaba que estos días están haciendo juntos, directos de Instagram en los que se preguntan tonterías el uno al otro.
Entre ellas, el momento más ridículo que vivieron en su infancia. Algo que llamó la atención de Pablo Motos, que quiso saber cuál fue el de Sevilla.
“Una cosa que me pasó cuando era un niño”, empezó relatando el actor. “Me gustaba la más guapa de mi clase y en ese momento no me comía un colín. Le pedí salir, muerto de la vergüenza, tardé un cuarto de hora en armarme de valor y me acerqué a ella”.
Fe entonces cuando le dijo: “¿Quieres salir conmigo?” y cuando ella respondió que sí, a él le salió darle las gracias: “No sé porqué le dije gracias”, exclamó.
Pero no conforme con ello: “Cuando se lo dije, sonreí como un gilipollas y me salió una pompa de moco y explotó”, recordó entre las carcajadas que provocó en el plató. “Gracias a Dios eso me ha dejado de pasar. Yo no he visto a ningún adulto con la pompa esa”, añadió.
Para acabar, la relación finalizó de la peor forma: “El caso es que la chica, como media hora después mandó a la amiga y ella me dijo que cortaba conmigo. Es fue mi primera relación, muy intensa, lo pasé fatal cuando me dejó porque me gustaba muchísimo”, concluyó.