Paul Ritter, conocido televisivamente por su papel en la reconocida y premiada serie Chernobyl, y que a nivel cinematográfico también tuvo una importante participación en la saga Harry Potter, ha fallecido este 5 de abril a los 54 años de edad.
El actor padecía un tumor cerebral que ha acabado con su vida, como ha confirmado a través de The Guardian su representante: “Con gran tristeza podemos confirmar que Paul Ritter ha fallecido. Murió en paz en casa con su esposa Polly y sus hijos Frank y Noah a su lado”.
Con una reconocida carrera en televisión, cine y el teatro, Ritter alcanzó la fama gracias a protagonizar la comedia Friday Night Dinner, en la que interpretaba a Martin Goodman hasta su último capítulo en mayo de 2020. El creador de la sitcom, Robert Popper, se ha mostrado consternado por la noticia: “Devastado por esta noticia terriblemente triste. Paul era un ser humano encantador y maravilloso. Amable, divertido, supercariñoso y el mejor actor con el que he trabajado”. De hecho, Ritter aparecerá en la retrospectiva del décimo aniversario de la serie que emitirá Channel 4 a finales de este año.
Sin ninguna duda su papel de Anatoly Dyatlov -el supervisor de la prueba de seguridad que terminó con el famoso accidente nuclear- en la serie Chernobyl de HBO hizo que su trabajo llegase a un público aún más global en el año 2019. Antes, ya había actuado en otras ficciones televisivas como The Game (2014), Great Expectations (2011).
En cine también intervino en famosos taquillazos como Inferno (2016, de la saga El código Da Vinci), Harry Potter y el misterio del príncipe (2009, de la saga del mago de J.K. Rowling) y Quantum of Solace (2008, de la saga de James Bond).
También destacó sobre las tablas, y es que sus interpretaciones teatrales le hicieron ser nominado al premio Tony por la comedia The Norman Conquests, y también nominado al premio Laurence Oliver por la obra Coram Boy.
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