Netflix ha sido acusada de “desviar a paraísos fiscales” hasta 386 millones de euros en beneficios conseguidos durante el año 2018. Según la organización británica Taxwatch UK, dedicada a la transparencia fiscal, la plataforma habría tomado parte de sus beneficios conseguidos fuera de Estados Unidos (entre 294 y 386 millones) y los habría desviado a países en los que apenas paga impuestos. Éstas cifras se refieren al negocio mundial de la compañía, pero la organización ha acotado su investigación al caso británico.
En Inglaterra, esta tiene 10 millones de suscriptores que pagan 1.000 millones de euros al año; sin embargo, en 2018 Netflix sólo declaró ingresos por valor de 48 millones de euros y un beneficio de 2,3 millones de euros antes de impuestos. Taxwatch sostiene que esta diferencia entre lo que pagan los socios y lo que declara la empresa se debe a que las cuotas están siendo desviadas a su sede europea en los Países Bajos, donde disfruta de una fiscalidad más favorable.
Además, la organización señala que Netflix recibió en 2018 un reembolso fiscal de 57.000 euros y solicitó a Reino Unido una desgravación de 1 millón por los beneficios que le corresponden por grabar series y películas en territorio británico. En el año 2019, el servicio de streaming, que tiene 200 empleados en este país, rodó 50 producciones en la isla por un valor de 470 millones de euros, entre ellas The Crown y Sex Education, informa el periódico The Guardian.
En declaraciones recogidas por Deadline, un portavoz de Netflix al que no se menciona ha señalado que “corresponde a los gobiernos decidir las reglas cuando se trata de impuestos, y en todos los países en los que operamos, Netflix respeta esas reglas”.
En España, 3.146 euros en impuestos
El caso británico es parecido al español. En 2018, las filiales que Netflix tiene en España declararon unos ingresos conjuntos de 538.921 euros y un beneficio neto de 9.439 euros. Las cifras no tienen en cuenta el dinero que se cobra a los dos millones de usuarios españoles, cuya cuota se gestiona a través de una sociedad holandesa.
Como consecuencia, Netflix pagó 3.146 euros por el impuesto de sociedades en su primer ejercicio fiscal, cantidad que se aproxima a lo que pagan los autónomos que ganan 24.000 euros anuales.
Es decir, la empresa sigue facturando a sus clientes españoles a través de la sociedad holandesa para conseguir una fiscalidad más ventajosa. Algo que también hacen otras grandes tecnológicas como Google, Amazon, Facebook y Apple.
Tras desvelarse estos datos, la compañía explicó a VERTELE que “Netflix contribuye a la economía española de muchas maneras diferentes”. “En 2018, más de 13.000 actores, técnicos y figurantes trabajaron directamente en proyectos originales de Netflix en España. Este año el número gira en torno a 25.000 empleos relacionados con la producción original: una cifra que irá en aumento a medida que sigamos invirtiendo en la creación de contenido español”, agregó la empresa.